El pueblo de Tarragona en el que se puede visitar una avioneta estrellada en 1994

En la Serra de Llaberia, un paraje montañoso de Tarragona, descansan los restos de una avioneta que se estrelló el 12 de marzo de 1994, dejando una huella imborrable en la historia local. El accidente, que costó la vida a los tres ocupantes de la aeronave, sigue siendo recordado tanto por los lugareños como por los visitantes que se acercan hasta el lugar para conocer de cerca el trágico suceso.

La avioneta, que había partido de Cuatro Vientos en Madrid con destino a un rally aéreo en Vilanova de Prades, perdió el contacto con la torre de control a medida que se acercaba a su destino. La aeronave se estrelló en la Sierra de Llaberia, debido a las condiciones de niebla espesa y el accidentado terreno de la zona.

El impacto acabó con la vida del piloto y de sus dos acompañantes: Luis Martín Granizo, Miguel Ángel Duperrier Prado y Amós Blanco Díaz. A pesar de los años transcurridos, los restos del avión permanecen en la zona, convirtiéndose en un destino de peregrinación para excursionistas y curiosos. 

Los restos del accidente, parcialmente visibles en el terreno accidentado, son accesibles a través de rutas de senderismo, como la que parte del pueblo de Llaberia y atraviesa el Cingle de Calàs. Eso sí, aunque el camino ofrece vistas impresionantes de la montaña, los excursionistas deben ser cautelosos, ya que la ruta puede ser difícil de seguir y el terreno es escarpado.

El lugar del accidente, conocido por su atmósfera misteriosa, atrae a muchos turistas interesados en la historia de la tragedia, y algunos grupos locales organizan rutas para recordar el suceso y rendir homenaje a las víctimas. Además, el accidente forma parte del patrimonio local, siendo una referencia para los habitantes de la región, que recuerdan aquel fatídico día de 1994 como un acontecimiento que marcó al pueblo.