Carreteras
Los Mossos hacen controles en la AP-7 en l'Aldea a camioneros y repartidores para reducir la siniestralidad
El dispositivo se ha desplegado en el área de servicio del Baix Ebre por las últimas incidencias en este tramo de la autopista

Agentes de los Mossos d'Esquadra parando un camión en el área de servicio del Baix Ebre en la AP-7, a la altura de l'Aldea.
Los Mossos d'Esquadra han desplegado un control en materia de seguridad vial este miércoles en el área de servicio del Baix Ebre de la AP-7, a la altura de l'Aldea, con el objetivo de redciur la accidentalidad entre los conductores de camiones y de furgonetas. El dispositivo ha arrancado a las 9.30 de esta mañana y se alargará hasta la una del mediodía. Además, se repetirá este jueves. La campaña también se hace en otros puntos de Cataluña.
«Estamos haciendo controles de alcoholemia y drogas, de momento, los resultados han dado negativo», ha explicado el sargento del Área Regional de Tráfico en las Terres de l'Ebre, Miquel Martínez. La semana pasada, en este tramo murió un camionero en un accidente con tres camiones implicados.
«Últimamente, hemos tenido incidencias bastante relevantes en este tramo de Terres de l'Ebre», ha señalado el responsable del cuerpo policial. El martes pasado, un camionero murió de madrugada en un accidente con tres vehículos pesados implicados, ya uno de los conductores cruzó la media, invadió el sentido contrario y chocó con otro camión que circulaba en sentido norte. Con el tercer vehículo se tropezó con los restos del siniestro y volcó fuera de la autopista. El accidente provocó retenciones a lo largo de trece kilómetros desde Freginals en sentido norte.
Desde principios de año, este es el único camionero que ha muerto en este tramo ebrense de la autopista. «En los últimos cinco años sí que hemos tenido más víctimas mortales, lo que queremos destacar es que, aparte de víctimas mortales, tenemos bastante accidentalidad en personas heridas, graves y mortales, ya no tan sólo víctimas mortales, sino también víctimas graves», ha lamentado el sargento. «La AP-7 es una vía de alta capacidad, soporta una media de 12.000 vehículos pesados al día, y por eso tenemos esta accidentalidad tan relevante», ha añadido.
Por este motivo, la campaña de este miércoles se centrará en hacer controles de alcohol, drogas, velocidad y, especialmente, se incide en el control de los tiempos de conducción y de descanso porque este, sostiene al sargento, es un «elemento que implica directamente en la accidentalidad».