Movilidad
Preocupación por como puede afectar a la nueva línea de AVE Lleida-Barcelona a los tarraconenses
El Ministerio afirma que la nueva línea resolverá la falta de capacidad del tramo actual con Tarragona y permitirá incrementar los servicios regionales en Cataluña

El Ministerio licitó ayer el estudio de la nueva línea de alta velocidad
El Ministerio de Transportes va directamente y ayer mismo ya licitó el estudio de la nueva línea de AVE Madrid-Barcelona, que evitará Tarragona. Una noticia que cogió por sorpresa a los agentes políticos y sociales del territorio, que de forma más o menos explícita rechazan la propuesta.
El departamento de Óscar Puente expone en los pliegos técnicos de la licitación del estudio que el tramo Campo Tarragona-Barcelona Sants ha pasado a tener una «carga de trenes significativamente superior al resto de la línea» desde que se conectó con el Corredor Mediterráneo el año 2020. Además, el Ministerio admite un «elevado nivel de saturación» diario, que se espera que todavía sea mayor con el crecimiento de los tráficos de mercancías por la línea. En este sentido, desde Madrid se explica que esta nueva línea de alta velocidad servirá para «descongestionar» la de Tarragona y, a su vez, liberar el Corredor Mediterráneo.
Sin embargo, estas exposiciones no convencen ni a los usuarios ni a los representantes políticos del territorio, de que se muestran preocupados por como puede afectar a esta nueva línea en un futuro. Noemí Llauradó, presidenta de la Diputación de Tarragona, expresa que «cualquier mejora de la línea Barcelona-Madrid tiene que ser compatible con mantener y reforzar el rol estratégico del territorio, que no se puede quedar al margen de las grandes decisiones de infraestructuras». El Ministerio de Transportes insiste en que no se perderán trenes, sino que se ganarán servicios regionales.
Terminar proyectos
Ahora bien, varios alcaldes de la Asociación para el Impulso Metropolitano consultados por este medio indican que hay que priorizar proyectos que todavía no están ligados, como el Corredor Mediterráneo o las estaciones intermodales, antes de iniciar nuevos. Desde Tarragona ciudad, el alcalde Rubén Viñuales no ha querido valorar la propuesta de Puente, mientras desde la oposición el conseller de ERC Xavi Puig considera que «nos hartaremos de ganar mercancías y perder pasajeros». ¿«Dónde está el grito al cielo del alcalde? ¿Dónde son los resultados de su trabajo discreto y silente»?, pregunta Puig.
Por su parte, Jaume Casañas, alcalde de Cunit, eleva la crítica: ¿«Cómo puede ser que hace una semana se presente la Estrategia Ferroviaria por parte del Gobierno de la Generalitat y después salga el Ministerio y la modifici priorizando solamente el AV350? Golpecitos en la espalda, pero siguen haciendo los mapas del futuro de Cataluña desde Madrid». La primera reacción del ejecutivo de Illa al plan de Puente llegó ayer tarde por parte de Sílvia Paneque, consellera de Territorio y Movilidad. «En ningún caso creo que se haya planteado este proyecto en detrimento de las inversiones para mejorar Rodalies y regionales, ni de los planes que tenemos aprobados con la estrategia ferroviaria», expuso a la consellera. Así todo, desde Nuevos Ministerios se recalca que la nueva línea de AVE es un proyecto a 20 o 30 años vista. «Desde el Ministerio siempre invierten con proyectos nuevos. Será más fácil ir a Madrid a trabajar que a Barcelona», denuncia Anna Gómez, portavoz de la plataforma de usuarios Dignidad en las Vías.