Diari Més

Gastronomía

Devolver al pasado para entender el presente: un viaje gastronómico a la antigua Tàrraco

Tarragona ha llevado a Madrid, San Sebastián y Zaragoza un ‘showcooking’ para dar a conocer la cocina romana

El chef Moha Quasch ha elaborado el menú con el sumiller David Bea y Marc Garcia de la Pastisseria Velvet.

El chef Moha Quasch ha elaborado el menú con el sumiller David Bea y Marc Garcia de la Pastisseria Velvet.Gerard Marti Roig

John Bugarin
Publicado por

Creado:

Actualizado:

La gastronomía juega un papel fundamental en la construcción de la identidad cultural de un pueblo. Para hacer una radiografía de la sociedad de la antigua Tàrraco, es importante conocer qué ingredientes utilizaban y cuáles técnicas utilizaban en las cocinas de la época romana. El menú Olivus ideado por Moha Quach, chef del restaurante El Terrat y presidente de la asociación Tàrraco a Taula, permite hacer este viaje culinario hasta tiempos pretéritos y saber qué comían nuestros antepasados.

Esta propuesta ya ha llegado en forma de showcooking a ciudades como Madrid, San Sebastián o Zaragoza. La acción promocional impulsada por Tarragona Turisme, enmarcada dentro del 25.º aniversario de la declaración Tàrraco como Patrimonio de la Humanidad, se presentó ayer ante la prensa tarraconense, que pudo probar diferentes recetas recuperadas de la gastronomía romana marinadas con vinos del territorio escogidos por el sumiller David Bea.

La introducción al menú empezaba con una pequeña representación teatral protagonizada por Agrius Estenelus, propietario de una bodega de la época, que invitaba todos los presentes a cenar en su casa. Sobre la espalda, llevaba un ánfora con vino producido en sus terrenos a pocas millas de Tàrraco. Esta bebida sagrada y divina para los romanos no podía faltar en el menú Olivus, que arrancó con unos aperitivos únicos con diferentes ingredientes estrella: buñuelos de setas, gambas blancas, panes de mantequilla y moretum. Tampoco podía faltar el garum, una salsa hecha de diferentes tipos de pescado fermentado muy popular en la antigua Roma. Todo eso acompañado por la Siria Kveik Sumerian Ale, una cerveza «mesopotámica» creada por David Bea.

La velada continuó con un primer plato de ostras del Ebro con escabeche de calabaza y unas gotas de garum, acompañado con un Nudo del Terruño Blanco. De segundo, cordero cocinado a baja temperatura con setas glaseadas y trufa, casado co vino tinto del Priorat, un Gratallops de Álvaro Palacios . Marc Garcia, de la Pastelería Velvet, elaboró los postres: flan de requesón, buñuelos de calabaza fermentados y galletas de almendra.

La consejera de Turismo, Monts Adan, destacó la repercusión tan «positiva» que esta propuesta promocional ha generado en las tres ciudades donde ha llegado. Concretamente, se han registrado hasta 8,5 millones de visualizaciones y lecturas de los artículos publicados por los medios asistentes a las sesiones realizadas, unas publicaciones valoradas en «más de 600.000 euros». La próxima convocatoria será en Toulouse (Francia) este septiembre y ya se estudia llevarlo a otros países como Alemania o los Países Bajos.

tracking