Inundaciones
Decepción vecinal en la Mora un año después de la DANA: «Si volviera a llover así, pasaría el mismo»
Los residentes del barrio consideran que el Ayuntamiento de Tarragona «no ha tomado las medidas necesarias» para evitar episodios como el del 4 de noviembre del 2024

Imagen de archivo de una calle de la Mora inundada después de los aguaceros de la madrugada del 4 de noviembre del 2024.
«Tristeza, desánimo y decepción». Este es el sentimiento generalizado entre los vecinos de la Mora, justo un año después de las inundaciones que sufrió el barrio la madrugada del 4 de noviembre por el paso de la DANA. Los residentes de esta urbanización de Levante consideran que ha habido «dejadez» por parte del Ayuntamiento de Tarragona, a quien acusan de «no haber tomado las medidas necesarias» durante los últimos doce meses para «evitar que se repita un episodio así».
«No están respondiendo ningún tipo de expectativa», lamenta el presidente de la Asociación de Vecinos de la Mora-Tamarit, Albert Franquès, quién asegura que «si volviera a llover como lo hizo aquella noche, pasaría lo mismo». Es decir, el torrente se volvería a desbordar, causando, de nuevo, graves daños materiales. Hay que recordar que las inundaciones de hace un año afectaron más de 150 viviendas, así como diferentes negocios. Los residentes y comerciantes afectados han tenido que hacer frente a dependidas mucho elevadas para poder reparar sus casas y locales.
Volver a la normalidad
«La prioridad tendría que ser volver a la normalidad y arreglar lo que está dañado», remarca el representante vecinal, quien asegura que «la cabecera del canal está sucia» y «todavía hay hojas de la arroyada en el puente de la calle Baix Llobregat». También está pendiente la reparación del tramo del paseo de la Mora que quedó estropeado. Desde el consistorio aseguran que «se está esperando a la autorización de Costas» para llevar a cabo la intervención.
El pasado 20 de enero, los residentes del barrio presentaron una moción al Ayuntamiento de Tarragona para hacer frente a los efectos de la DANA y tomar medidas para evitar nuevas inundaciones. El pleno municipal aprobó por unanimidad la propuesta, de que contemplaba, entre otros, la actualización del Plan de Protección Civil de Tarragona. Fuentes municipales aseguran que «está en fase de redacción la revisión del Documento Único de Protección Civil del Municipio (DUPROCIM)», donde se contemplarán «las actuales zonas de afectación por riesgo de inundaciones de la Mora», que se basan en los datos de la Agencia Catalana del Agua.
Desde la asociación de vecinos también se muestran «enfadados» porque consideran que el consistorio «ha vendido humo» con alguno de los proyectos anunciados. El pasado 1 de octubre, se iniciaron las obras de construcción del nuevo tanque anti-DSU a la urbanización. Esta infraestructura, que costará 1,3 millones de euros, podrá almacenar un máximo de 1.000 metros cúbicos de agua.
El gobierno municipal aseguró que esta obra ayudará a «minimizar al máximo la posibilidad de desbordamientos del canal». En cambio, Franquès asegura que este depósito es «exclusivamente» para «aumentar la resiliencia del alcantarillado» y, por lo tanto, no servirá para evitar episodios como el de hace un año. Además, indica, la capacidad del tanque «no es tan grande, teniendo en cuenta que la piscina olímpica de Campclar tiene 3.500 metros cúbicos».
Reparaciones por 50.000 euros
Después de las inundaciones, se realizaron tareas de limpieza vial, de playas y de recogida de residuos en la ciudad, y se retiró y sustituyó el arbolado estropeado. También se repararon los daños en el paseo de la Mora y, ahora, se está esperando en la autorización de Costas para actuar en la calle Baix Camp. Por otra parte, el Ayuntamiento asegura que el Departamento de Medio Ambiente ha realizado el estudio hidrológico del torrente, que fue una de las demandas que incluyó a la asociación de vecinos en la moción que presentó en enero.
Hace unas semanas, el consistorio licitó el mantenimiento de la vegetación en la cabecera del canal de la Mora por 14.000 euros. Los trabajos, que se harán dos veces al año, permitirán mejorar y facilitar el paso y evacuación de las aguas circulantes. García Latorre asegura que se han tomado todas estas medidas para que «no vuelvan a pasar situaciones como la de hace un año o sean mucho menos agresivas».