Economía
El Ayuntamiento de Tarragona amortizará 6,2 MEUR en préstamos y bajará la ratio de deuda viva al 57%
La operación, que se financiará con el remanente del 2024, generará un ahorro de 1,1 millones de euros para el consistorio

Imagen de archivo de la fachada del Palau Municipal del Ayuntamiento de Tarragona.
El Ayuntamiento de Tarragona prevé acabar este 2025 reduciendo la ratio de deuda viva hasta el 57%. El pasado mes de marzo, el consistorio ya destinó 8,5 millones de euros del remanente del 2024 —que fue de 14,7 millones con los sobrantes de los organismos autónomos— a la amortización anticipada de préstamos. Ahora, el gobierno municipal también ha decidido utilizar los 6,2 millones restantes a reducir el pasivo. Esta operación se concretará a través de un nuevo modificativo de crédito que, previsiblemente, será aprobado este viernes por el pleno municipal.
Por lo tanto, la totalidad del superávit del año pasado servirá para rebajar la deuda y permitirá alcanzar «una cifra histórica». Así lo remarca la consejera de Hacienda, Isabel Mascaró, quien recuerda que, en el 2012, se llegó al punto más álgido con una ratio del 163,24%. «Gracias a la buena gestión y que vamos arreglando absolutamente todo el que se puede con refinanciaciones y amortizaciones, entre otros, podremos acabar el año por debajo del 60%», señala.
La cuarta teniente de alcalde destaca el «gran hito» que se consiguió en marzo del 2024, cuando el Ayuntamiento «se situó por primera vez por debajo del 75% y salimos de la tutela financiera de la Generalitat de Catalunya». Este hecho permitió al consistorio ganar más autonomía, ya que podía empezar a pedir nuevos créditos sin necesitar el aval de la Dirección General de Política Financiera.
Hace seis meses, el ejecutivo socialista se planteó la opción de destinar parte del remanente del 2024 para inversiones financieramente sostenibles. Finalmente, se ha acabado descartando. «Les inversiones se tendrían que ejecutar dentro del año natural, antes del 31 de diciembre del 2025», explica Mascaró, quién indica que «a estas alturas, no hay tiempo material para hacerlo». Por eso, los 6,2 millones de euros que quedaron pendientes de asignar se utilizarán para amortizar dos préstamos.
Un gran ahorro
Más allá de abonar este dinero a los bancos, el Ayuntamiento ha conseguido «renegociar» las condiciones de otro préstamo que tiene pendiente de liquidar con Cajamar, mediante una «novación». La consejera de Hacienda explica que, con estos movimientos, se generará un ahorro de 1,1 millones de euros para las arcas municipales. Como explicó el Diari Més, el consistorio ya consiguió un ahorro de 5,6 millones de euros durante el 2024, gracias al pago de deudas y a la reestructuración del crédito de la Empresa Municipal de Transportes con Dexia Bank por el parking Jaume I.
Mascaró señala que es «importante» porque permite liberar gasto corriente y destinar más dinero a la prestación de servicios público. Además, disminuir el pasivo hace crecer la capacidad inversora del consistorio. El gobierno de Rubén Viñuales se muestra satisfecho por el trabajo hecho hasta el día de hoy, pero no tiene bastante: «Seguiremos picando piedra para bajar la ratio de deuda viva e ir saneando al máximo las cuentas del Ayuntamiento».
El ejecutivo, sin embargo, también quiere «garantizar inversiones transformadoras en la ciudad». En este sentido, Mascaró recuerda que se concertó un préstamo de 4,5 millones de euros en marzo para comprar autobuses o construir el depósito anti-DSU en la Mora, entre otros; después de haber destinado 8,5 millones a saldar deudas.