Laboral
Los trabajadores del Joan XXIII protestarán para exigir mejores condiciones laborales
Los sindicatos denuncian la falta «crónica» de personal y las vulneraciones «continuadas» de sus derechos

Imagen de archivo de un grupo de enfermeros protestando delante del Hospital Joan XXIII en diciembre del 2023.
Los trabajadores del Hospital Joan XXIII protestarán la semana que viene para exigir mejores condiciones laborales. Los sindicatos han acordado movilizarse el lunes, martes y miércoles para denunciar la «grave» situación que sufre el personal del centro, marcada por una «gestión deficiente». A las 7.45 h, se concentrarán en la zona de dirección, donde se escuchará una gran pitada, que se trasladará a las puertas del hospital a las 11 h.
El pasado 19 de junio, la Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) emitió un comunicado donde señalaba las «vulneraciones continuadas de los derechos laborales» de los trabajadores. En este sentido, alertaban de que «la mayoría de los profesionales acumulan más de 30 días pendientes de disfrutar correspondientes al año 2024». Además, apuntaban que existe una denegación sistemática y «sin justificación», por parte de la dirección, de los seis días de asuntos propios que recoge el convenio.
Asimismo, aseguraban que el personal sufre modificaciones constantes en sus planificaciones semanales «muchas veces notificadas con menos de 48 horas de antelación». Esta semana, el sindicato FTPS también ha denunciado todas estas problemáticas, las cuales «está llevando a los profesionales al límite».
El delegado sindical de FTPS y presidente de la Junta Personal del Joan XXIII, Ángel Chávez, destaca la «falta crónica de personal» como uno de los grandes asuntos a resolver. En este sentido, no sólo señala a la dirección del centro, sino también al Institut Català de la Salut.
«Reclamamos que se respeten los derechos laborales y la flexibilidad para conciliar, así como la transparencia y la comunicación fluida con los profesionales», remarca. Por otra parte, alerta de que la situación que sufre el personal puede comportar «riesgos graves en la calidad asistencial», ya que los trabajadores se encuentran «agotados física y mentalmente».
Con respecto a esto, la Federación de Asociaciones de Vecinos de Tarragona (FAVT) y la Plataforma por la Salud del Camp de Tarragona han lamentado, a través de un comunicado, el cierre de camas en Joan XXIII. Ambas entidades reclaman que se amplíe la plantilla: «No es cuestión de hacer más edificios, más habitaciones, más servicios, si después no los tienen cubiertos con personal».