Diari Més

El Servicio de Medicina Intensiva del Joan XXIII celebra el primer aniversario de la consulta externa

La consulta evalúa el síndrome post cuidados intensivos en pacientes que pueden sufrir alteraciones desde el punto de vista físico, emocionales y cognitivos

Imatge del Servei de Medicina Intensiva de l'Hospital Joan XXIII.

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Este mes de abril se cumple un año de la apertura de la consulta externa del Servicio de Medicina Intensiva del Hospital Universitario Joan XXIII de Tarragona, después de un periodo de prueba piloto. Esta consulta evalúa el síndrome post cuidados intensivos o PICS (Post Intensive Care Syndrome), que es un conjunto de síntomas que pueden aparecer después de haber estado ingresado unos días en la UCI. En caso de presentarse, pueden ser físicos, emocionales o afectar a la memoria y a la atención, entre otros.

La especialista de laUCI, la médico Mònica Magret, explica que «muchos pacientes que han sido ingresados en la UCI sufren alteraciones desde el punto de vista físic, mental y cognitivo, y esta consulta pretende estudiar la prevalencia con el objetivo de hacer un diagnóstico y poder aplicar un tratamiento».

En esta consulta, que tiene una hora de duración, dos días a la semana (martes tarde y viernes mañana), se hacen un conjunto de pruebas diagnósticas (tests y exploración física) para evaluar la calidad de vida, la autonomía, la fuerza muscular, la fragilidad, la desnutrición, las alteraciones cognitivas y emocionales, la ansiedad, la depresión y el síndrome de estrés posttraumático.

La especialista del Servicio de Medicina Intensiva, la médico Mari Gilavert, afirma que «esta síndrome hace poco que se conoce y la consulta ha permitido a los profesionales del servicio tomar conciencia de las secuelas del ingreso en la UCI e identificar medidas para intentar prevenirlas durante la estancia de los pacientes en el servicio».

Además, «contribuye a mejorar la satisfacción del paciente, de la família y de los mismos profesionales». Una vez detectadas las secuelas, se deriva el paciente al especialista correspondiente. En función de las esferas alteradas, los pacientes se pueden derivar al neuropsicólogo, al psiquiatra o al traumatólogo y rehabilitador, por ejemplo.

Al cabo de un año, han pasado por la consulta más de 100 pacientes. Más del 80% ha tenido algún tipo de alteración y ha necesitado la derivación al especialista correspondiente. El 47% de estos solo ha tenido una esfera afectada; el 39%, dos esferas, y el 12%, tres esferas. Las esferas más afectadas han sido la combinación de alteraciones físicas y cognitivas.

El equipo de Medicina Intensiva responsable de la consulta externa está formado por las médicos especialistas Sara Manrique, Mari Gilavert, Vanessa Blázquez y Mònica Magret, y por la enfermera de práctica avanzada, Diana Gil.

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