La Canonja se desvincula del contrato de limpieza de Tarragona

La Canonja se desvinculará definitivamente del servicio de recogida de residuos de la ciudad de Tarragona el próximo 28 de abril, fecha en la que, de hecho, se extingue el actual contrato con el concesionario, FCC.

La localidad, que quedó constituida como municipio independiente el 30 de octubre de 2010 después de un largo proceso de segregación, contratará el servicio mancomunado con el Consell Comarcal del Tarragonès que, en este caso, también presta FCC Medio Ambiente S. A. De esta manera, la Canonja renuncia a prorrogarlo con la capital, una opción que estaba contemplada en el acuerdo de segregación. Con la desvinculación del servicio de limpieza de la capital, la Canonja cortará prácticamente todos los vínculos con Tarragona, a excepción del transporte. Y es que, fruto de un acuerdo aparte, la Empresa Municipal de Transporte de Tarragona (EMT) seguirá prestando el servicio en la Canonja. Dado el alto grado de satisfacción de las líneas y frecuencias de autobuses que ofrece al municipio, el consistorio canonjino espera mantener el servicio de forma permanente.

Con respecto a la limpieza y recogida de residuos, según el alcalde de la Canonja, Roc Muñoz, «de momento no haremos licitación propia, ya establecimos contactos con el Consell Comarcal del Tarragonès hace tiempo para firmar el convenio». «Tarragona está en una situación compleja y nosotros no continuaremos dentro de su contrato», añade.

El Ayuntamiento de la Canonja celebrará un pleno extraordinario este mes para aprobar el presupuesto para contratar el servicio con el FCC, el concesionario del ConsellComarcal. A partir de entoncesse decidirá si se necesita adquirir nueva maquinaria. «Ya lo podremos encomendar, pero no es algo que se haga de hoy para mañana, por lo que, mientras tanto, pagaremos la recogida y limpieza, pero no la amortización del material», dice el alcalde canonjino.

A pesar de su vinculación con el contrato tarraconense, Muñoz afirma que el servicio de limpieza funciona de forma «autónoma» con mejoras que el Ayuntamiento abona aparte, como la contratación de un pequeño camión y un conductor que cada tarde recoge la basura y trastos «que quedan fuera de los contenedores».

Este es un servicio que, según Roc Muñoz, el equipo de gobierno se plantea ampliar también porlas mañanas, ya que, con el cambio de contrato, se introducirán algunas mejoras. En el futuro, también se estudiará si se extiende la recogida puerta a puerta que, a estas alturas, sólo se lleva a cabo en una zona del municipio. «Esperamos que se dé un servicio adecuado a la población, dimensionado», concluye.

Por otra parte, en el año 2026, el Ayuntamiento dejará de abonar en Tarragona un porcentaje de la recaudación de los impuestos que pagan las empresas químicas y se quedará con el cien por cien, según el acuerdo económico de segregación.