Vecinos de Sant Salvador de Tarragona se quejan de que hace días que viven a oscuras

Quien quiera pasear por la calle del Barranc del Comellar cuando se ha puesto el sol lo tiene que hacer, desde hace casi un mes, a oscuras. «Tenemos unos 100 metros de farolas que no funcionan», detalla el presidente de la asociación de vecinos (AV) de Sant Salvador i Sant Ramon, Toni Garcia.

El Ayuntamiento confirma que unos individuos intentaron robar las farolas y el cableado de la vía. No obstante, comunica que se tardará en reparar la instalación, ya que se tendrían que «levantar las farolas enteras» porque quedaron destrozadas. Garcia señala que este es un caso vandálico y «esporádico», pero no es el único apagón que se ha vivido recientemente. Pedro Sánchez, presidente de la AV desde Sant Ramon iSant Salvador, explica que hace una semana que los vecinos de la avenida Sant Salvador que viven delante del instituto Pont del Diable tienen que utilizar una linterna para poder acceder a casa de noche.

Al mismo tiempo, reclama que se mejore la iluminación en la parada de autobús Educacional. Por su parte, Garcia recuerda que se pidió cambiar el alumbrado de las calles céntricas del barrio, que tiene «muchos años» y ha quedado «obsoleto»

Con todo, el consejero de Espacios Públicos, Xavier Puig, afirma que el gobierno prevé «destinar partidas presupuestarias que sigan la línea de renovación del alumbrado e instalar tecnología LED». «Cada año hacemos inversiones tecnológicas de este tipo para ganar en eficiencia, lo quepermite ahorrar e iluminar mejor», concluye Puig.

Los habitantes de la Granja critican la antigüedad del alumbrado público

La Granja también quiere poner luz a la oscuridad. En su caso, el problema reside en la antigüedad de las instalaciones, según el presidente de la AV del barrio, Francisco Rosillo. «Hay muchas farolas estropeadas. Las arreglan, pero, al cabo de poco tiempo, la bombilla se vuelve a fundir. Es lo que pasa cuando se hacen viejas las líneas», comenta.

La calle Perafort, la Deltebre y la de la Secuita son algunos de las que se han sumido recientemente en la penumbra. Una vecina, que prefiere mantener el nombre en el anonimato, asegura que, incluso, hay farolas que no se utilizan. Desde el Ayuntamiento, se explica que el número de incidencias en la Granja no es anómalo con respecto a otras partes de la ciudad.

Además, se apunta que el sistema de iluminación tiene entre 15 y 20 años, tiempo por el que no se considera antiguo, pero se anima a los vecinos a informar de cualquier incidencia por las vías de comunicación oficiales.