Diari Més

Estado de Alarma

«El Ramadán es una época en que la vida social tiene más peso que nunca»

La comunidad musulmana empezó el viernes el tradicional mes sagrado, condicionado por las limitaciones del confinamiento

Alloui en su espacio de plegaria y reflexión en su casa, en Frankfurt.

«El Ramadán es una época en que la vida social tiene más peso que nunca»Cedida

Publicado por

Creado:

Actualizado:

La comunidad musulmana de todo el mundo empezó el pasado viernes el Ramadán, un mes sagrado en el cual este año se tendrán que readaptar muchas de las costumbres y tradiciones características de esta época del año.

«Durante el Ramadán la vida social tiene más peso», asegura Yassir Zine Zine, vecino de Tarragona, que reconoce que este año será complicado en este sentido. De hecho, una de las cosas que se echan más de menos durante este confinamiento es esta vida social, ver a los familiares y encontrarse con amigos y conocidos.

Sin embargo, esta socialización se ha reinventado y, estos días, pasa únicamente por las redes sociales. Zine Zine explica que mantienen este contacto virtual «para preguntarnos como estamos y preocupándonos por el resto». De la misma manera, este año no pueden, por ejemplo, compartir la comida con los vecinos a la ruptura del ayuno, cuando cae la noche. «Tampoco podemos ir a rezar a la mezquita después de comer por la noche», explica Zine Zine, refiriéndose a la plegaria del Taraweh, que es única durante el Ramadán, en la que se lee una parte del Corán y que se añade a las cinco oraciones habituales en un día de un musulmán. «A causa del confinamiento hacemos esta plegaria en casa, con la familia», dice el joven tarraconense, que reconoce que es mejor hacerla en la mezquita. Otra de las acciones que se hacen durante el Ramadán y que ante la situación actual será más complicada de llevar a cabo es la de ayudar a la gente más desfavorecida.

Zine Zine asegura que los musulmanes lo hacen durante todo el año, «pero todas las buenas obras son más abundantes durante el Ramadán». En este sentido, el joven lamenta que actualmente estas ayudas se pueden hacer sólo a través de organizaciones y que muchas familias que se encuentran en situaciones complicadas no aceptan donaciones porque no quieren que se conozca su vulnerabilidad.

En esta línea, Zine Zine asegura también que no se hacen fotos ni vídeos de la ruptura del ayuno, ni se cuelgan en las redes sociales, porrespeco a aquellas personas que quizás no tienen la capacidad económica para comprar mucha comida.

De la Riera a Frankfurt

Quien también está viviendo este mes de Ramadán es la Farah Alloui, una joven de la Riera de Gaià, pero desde Alemania. Alloui fue a visitar a sus hermanos a Frankfurt hace unos meses y decidió quedarse. «Cuando buscaba trabajo en Tarragona, a las entrevistas me decían siempre si podría trabajar sin el pañuelo», lamenta la joven, que asegura, en cambio, que en Alemania contratan a la gente por sus capacidades y no por su aspecto o por su forma de vestir.

Es por eso que Alloui decidió quedarse en Frankfurt, donde vive con su hermano y la familia de este. Con ellos vive este mes de Ramadán. «Este año está siendo muy diferente, ya que echas de menos a los amigos y la familia, compartir la comida, que las mezquitas estén cerradas, etc., reconoce Alloui. De la misma manera que Zine Zine, Alloui recuerda que «el Ramadán no es sólo no comer durante el día y comer por la noche. Ramadán es compartir, es amar y es tener vida social, el ayuno sólo es como un sacrificio hacia Allah. Todos estamos dispuestos a hacer a lo que sea por quien amas, y nosotros nos pasamos el día sin comer ni beber».

La joven explica que parte de su familia vive en la casa del lado, y se ven pero muy poco y guardando las distancias de seguridad en todo momento. Finalmente, Alloui explica que se ha adaptado un espacio en casa destinado a rezar, a reflexionar, a leer y a aprender y asegura que es clave para tener una conexión con Allah, que es el objetivo del Ramadán.

tracking