Nadal: «Tenemos que frenar el declive y la parálisis crónica que hay en la ciudad»

Dídac Nadal no tenía ninguna intención de dedicarse a la política, «como toda mi generación y, probablemente, no habría entrado nunca si no fuera por la triste y desafortunada experiencia» que supuso la repentina muerte de Albert Abelló, portavoz del grupo municipal del PDeCAT en el Ayuntamiento de Tarragona, el mes de diciembre del 2017. Con estas palabras inició la Conferencia de Ciudad al candidato del Partit Demòcrata en la alcaldía de la ciudad, en un acto celebrado ayer tarde en el vestíbulo del Teatro Tarragona. El primer mensaje de Nadal fue lo bastante claro. «De todos y todas depende continuar el declive permanente y la parálisis crónica o hacer de Tarragona una ciudad extraordinaria».

Nadal desgranó un gran número de ideas generales sobre el estado de la ciudad actual y sus carencias, pero aportó contadas concreciones con respecto a las propuestas que planteará a los electores a las municipales del 26 de mayo con el fin de reconducir la situación. El candidato del PDeCAT sí que dijo que, si consigue el gobierno de la ciudad, promocionará la democracia participativa, creará consejos y policía de barrio, mejorará el contrato de la limpieza, pondrá cámaras de vigilancia en zonas como las urbanizaciones de Levante o ampliará el puente sobre el río Francolí de Ramón y Cajal.

Nadal, que desde que ocupa un asiento en el plenario de Tarragona se ha preocupado de mantener reuniones con entidades sociales y vecinales con el fin de ponerse al día en aquellos aspectos que preocupan a los ciudadanos, dijo que «estar al frente de este proyecto me ha permitido conocer mucho más todos los rincones de la ciudad y he tenido la oportunidad de estar en contacto con infinidad de ciudadanos y ciudadanas preocupados y ocupados al hacer posible que esta ciudad no sólo funcione sino que, además, ilusione».

Ya entrado en materia, el candidato del PDeCAT a la alcaldía de Tarragona, Nadal se dirigió a los presentes para decirles «comparto la preocupación de muchos y muchas de vosotras por lo que está pasando en Tarragona, pero pienso que la ciudad tiene todos los recursos necesarios, una enorme riqueza y muchas potencialidades que hay que aprovecharlas e impulsarlas». Por estos y otros motivos, «hay que recuperar la ilusión y la autoestima perdida», dijo Nadal.

Más voz a los ciudadanos

Dídac Nadal defendió la necesidad de «dar voz» a los tarraconenses, «con canales dirigidos a todo el mundo porque queremos una participación real». El candidato del PDeCAT recordó que Tarragona «ha sido, hasta el año pasado, la única capital catalana sin presupuestos participativos». Nadal añadió que hay que rehacer el diálogo entre el Ayuntamiento y el tejido asociativo, para asegurar que «son muchos los ciudadanos que «echan de menos a un interlocutor válido a la administración, después de la inexplicable desaparición de la figura del concejal de barrio».

Nadal se declaró a favor de «la creación de consejos de barrio, porque las asociaciones de vecinos y las entidades de Tarragona son un canal importantísimo para vehicular las demandas de cada zona». «Hay que fortalecer la relación entre estas y el Ayuntamiento», remarcó. El alcaldable también dijo que, «para combatir la inseguridad y dar respuesta a las demandas de la ciudadanía, hay que incrementar el número de agentes de la Guardia Urbana y el despliegue real de la policía de barrio». Nadal citó el Serrallo, la Part Baixa, los barrios de Ponent, el entorno del Parc del Francolí y las urbanizaciones de Llevant como sitios «donde se cometen centenares de robos con fuerza», un fenómeno que se extiende «por toda Tarragona». En este contexto, el concejal del PDeCAT declaró que hace «una apuesta por la instalación de cámaras de vigilancia». «Evidentemente –apuntó–, no nos gustas las cámaras, pero uno tiene que ser consciente de qué bien superior tenemos que proteger y saber que el trabajo no tiene que acabar con su instalación».

Con respecto a una movilidad sostenible en Tarragona, Nadal remarcó «no comprendo que la gente de Llevant, de Ponent y de Sant Salvador no pueda llegar a pie o en bicicleta al centro de la ciudad». También se mostró a favor de «convertir la T-11 en una auténtica avenida amable y adecuada para las personas» y para mejorar el sistema de transporte público que aplica el EMT. Dotar en el Banco de España y la Tabacalera «de un destino cultural», aumentar «el personal y la readmisión inmediata de los trabajadores del Museo de Historia» o la inversión en el deporte base fueron otros temas que trató. Nadal finalizó su intervención diciendo «el reto es enorme: hacer de Tarragona una ciudad extraordinaria, una Tarragona de la cual nos podamos volver a sentir orgullosos de pertenecer.»