La urbanización de las Parcelas Iborra se aprobará después del verano

La urbanización de las Parcelas Iborra se aprobará de manera definitiva una vez haya pasado el verano. El proyecto ya se encuentra sobre la mesa del concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Tarragona, Josep Maria Milà, quien lo acabará de estudiar antes de empezar los trámites por aprobarlo inicialmente. Una vez se haya dado el primer visto bueno, se abrirá un periodo de alegaciones de un mes de duración, que coincidirá con los meses estivales. La urbanización tendrá un coste aproximado de 2,8 millones de euros, que se repartirán entre los propietarios de las diferentes fincas según el tamaño de las mismas. La mayoría del vecindario está de acuerdo con el proceso de reparcelación y urbanización, pero algunos propietarios siguen denunciando que «sólo favorece a ciertas personas».

«La aprobación definitiva de la urbanización de las Parcelas Iborra llegará después del verano». Eran las palabras de Josep Maria Milà, a quien informaba de que «tengo el proyecto definitivo encima de la mesa». En los próximos días, el concejal de Urbanismo lo acabará de estudiar para empezar los trámites de aprobación inicial antes de la temporada estival. Las denominadas Parcelas Iborra se ubican junto al Nuevo Estadio, en un lugar de crecimiento que acogerá, entre otros equipamientos, la nueva escuela de la Arrabassada.

El proyecto de reparcelación se aprobó inicialmente en agosto del año pasado. Casi un año después, llegará la segunda parte del trámite. Si el calendario se respeta, el año 2019 podría ser el del inicio de las obras de urbanización. De esta manera, se culminaría un proyecto que empezó hace más de una década. «El objetivo del Ayuntamiento es ayudar a regular a la situación, mejorar los accesos, dotar la zona de agua corriente y red de alcantarillado, etc», manifestaba Milà, quién subrayaba que, «a estas alturas, son caminos en malas condiciones».

El presupuesto para urbanizar el espacio es, aproximadamente, de 2,8 millones de euros. Se trata de una cifra bastante menor a la que se había llamado|dicho en un principio y que llegaba a los 5 millones de euros. Los costes se repartirán entre el vecindario de manera proporcional. Las fincas pequeñas tendrán que abonar entre 25.000 y 35.000 euros, mientras que las mayores, ubicadas mayoritariamente en la parte inferior de los terrenos, pagarán entre 300.000 y 400.000 euros.

Una vez se haya urbanizado la zona, los propietarios de las fincas podrán empezar a construir viviendas. Está prevista la construcción de una cincuentena de casas. La mayoría se ubicarán en la parte inferior de la urbanización, es decir, donde hay las fincas mayores. Cerca también habrá una zona verde y equipamientos como la nueva escuela de la Arrabassada, que ya se está construyendo. Se trata, por lo tanto, de un espacio de Tarragona en crecimiento.

Alegría y decepción

La mayoría de los propietarios de las Parcelas Iborra han recibido esta noticia con alegría. «Esperamos que el calendario se cumpla. Estamos muy satisfechos con la tarea de los técnicos del Ayuntamiento, y sólo deseamos que puedan empezar las obras el más bien posible», expresaba el presidente de la Asociación Administrativa de Cooperación, Enric Casasayas.

La alegría, sin embargo, no es compartida entre todos los propietarios. Una parte del vecindario sigue pensando que el proceso de reparcelación, aprobado inicialmente, «sólo favorece a los grandes propietarios y aquellas personas implicadas en la Junta de Compensación. En el resto, nos» empobrecerá. El concejal de Urbanismo es conocedor de esta división de opiniones, pero manifestaba que «se ha hecho un trabajo de cirugía porque estos acuerdos son muy difíciles». Por su parte, Casasayas expresaba que «respetamos todas las opiniones, pero creemos que lo hemos hecho de la manera más objetiva posible». Los trámites para aprobar la urbanización empezarán de manera inmediata.