Más de 3.500 vigilantes de seguridad de Cataluña se han examinado en Tarragona
Las pruebas para acceder al título de los aspirantes del país se centran, desde hace tres años, en el Complex Educatiu de Tarragona y en el polideportivo el Fornàs de Valls
Tarragona centra desde hace tres años las pruebas para acceder a la profesión de Vigilant de Seguretat de toda Cataluña. Por este motivo, se han examinado en la demarcación unos 3.500 aspirantes a las cinco convocatorias que se han hecho a lo largo del 2016, 500 de ellos provenientes de diferentes lugares de la provincia. Estos datos los dio a conocer Carlos Yubero, comisario jefe del Cuerpo Nacional de Policía en Tarragona a lo largo del X Día de la Seguridad Privada que se celebró ayer y que presidió el subdelegado accidental de Tarragona, Emilio Ablanedo.
Sobre el Cuerpo Nacional de Policía recae la obligación del control de las empresas de seguridad privada y, por eso, se mantienen regularmente reuniones con estas empresas y también con sindicatos que dan como resultado un valioso intercambio de información por la seguridad global de la ciudadanía. Dentro de este apartado, Yubero mencionó que en 40 ocasiones se han realizado comunicados dentro de lo que policialmente se conoce como Red Azul, un plan de intercambio de información entre el Cuerpo Nacional de Policía (CNP) y la seguridad privada, colaboración que tiene como finalidad la mejora de la seguridad ciudadana.
Inspecciones regulares
Al CNP le corresponde también por ley hacer inspecciones a las empresas dedicadas al sector de seguridad. El comisario Yubero informó de la realización de 200 inspecciones que dieron como resultado 17 expedientes sancionadores a la provincia. El jefe policial remarcó en su discurso la importante tarea de la seguridad privada, ya que, si bien corresponde al Estado las funciones de garantizar los derechos y libertades, es evidente que «necesita otros operadores», como los vigilantes de seguridad, que están presentes cada vez en mayor medida en los lugares donde potencialmente se requiere una vigilancia.
La Red Azul contribuye especialmente a sumar informaciones en una misma dirección y por eso, su tarea es cada vez más importante. Aleix Asna, director del grupo Cep-Frada, centros de formación de los vigilantes, se congratuló que la imagen de los vigilantes de seguridad ha cambiado en los últimos años dentro de la sociedad. En eso ha ayudado la estricta ley del sector, introducida en el 2014, a la más dura de la Unión Europea con respecto a la regulación del acceso. Eso ha comportado una realidad: los profesionales han ganado en preparación y profesionalidad. El subdelegado accidental de la provincia, Emilio Ablanedo, pronunció un discurso con toques históricos –como ya nos tiene acostumbrados– haciendo referencia a que la primera vez que se celebró una festividad como ésta se hizo en 1518, cuándo el rey Carlos I promulgó la primera norma sobre seguridad privada en nuestro país, y es precisamente la conmemoración de esta efeméride y a petición del sector se ha acordado obligatoriamente la celebración de un día de la seguridad privada. Sirve para destacar y poner de manifiesto el trabajo de la seguridad privada, dijo el subdelegado.
Ablanedo hizo referencia a la labor auxiliar y complementaria de los cuerpos de seguridad: «Difícilmente hoy en día podemos pensar en una actividad que la seguridad privada no tutele. Es imposible ir a un centro comercial, ir a un campo de fútbol, ir a una estación de tren, en un aeropuerto... y no encontrarnos con agentes de seguridad privada. Tenemos más de 100.000 profesionales dedicados a este trabajo, 1.600 empresas y más de 1.000 academias de formación». «La sociedad –decía Ablanedo- ve cada vez esta labor como más positiva y profesional de nuestros vigilantes».
78 menciones honoríficas
A lo largo del acto del X Día de la Seguridad Privada se concedieron 78 menciones honoríficas, una de las cuales era de categoría «a» que se otorga a quien ha destacado por una actuación de colaboración con las fuerzas de seguridad y por su profesionalidad en un caso puntual. Este reconocimiento recayó sobre la persona del vigilante de seguridad Juan Carlos González, que recibió el galardón de manos del subdelegado accidental Emilio Ablanedo.