Vía Pública
Las denuncias por tirar la basura donde no toca se multiplican en Reus por 13 en los últimos 19 meses
Entre enero del año pasado y julio de este año se han levantado 434 actos por incivismo

Un trabajador de Reus Net depositando basura en un contenedor lleno de desperdicios abandonados en la vía pública.
Las denuncias impuestas por la Guardia Urbana de Reus a los ciudadanos que cometen actos incívicos vertiendo la basura como no toca se han multiplicado por 12,9. Estos datos suministrados por parte del Ayuntamiento de Reus corresponden al estudio comparativo de las medias mensuales de denuncias de 2024 y 2025 con respecto a los ejercicios de 2021, 2022 y 2023.
Una situación que llega casi un año después de que el consistorio decidiera impulsar una campaña de sensibilización en torno a esta problemática, a la vez que endurecía las sanciones con relación a estas infracciones. Hay que tener en cuenta que estas acciones incívicas suponen un coste extra para las arcas públicas municipales, ya que tienen que realizar servicios extraordinarios de recogida y limpieza. Este hecho supone un coste añadido que sube hasta los 895.000 euros anuales.
En total, la Guardia Urbana de Reus ha levantado un total de 434 actos desde enero de 2024 por diferentes incumplimientos de la Ordenanza de Civismo en cuestiones relacionadas con la basura. Concretamente, 245 se levantaron durante el 2024 y 189 entre los meses de enero a julio de 2025. Estos datos suponen una media de 23,3 actos mensuales, que suponen un incremento muy considerable con respecto a los años 2021, 2022 y 2023 en los que la media era de 1,81 actos al mes.
Con respecto a las categorías de las infracciones, destacan los 363 casos en los que se levantó un acto por dejar la basura fuera de los contenedores de recogida. A continuación, van los casos de sustraer materiales o elementos depositados en contenedores de recogida en la vía pública cuando esta provisión pueda ser destinada a una posterior venta, con 44.
En tercer lugar, se denunciaron 16 casos de dejar o depositar en la vía pública y fuera de los espacios autorizados objetos, escombros o desperdicios, siempre que esta no sea una infracción grave y, finalmente, en 11 ocasiones se pilló a los infractores depositando la basura en los contenedores fuera del horario establecido para cada tipo de residuo.
Campaña de sensibilización
No obstante, en declaraciones a Diari Més el concejal del área de Vía Pública del Ayuntamiento de Reus, Daniel Marcos, rompe una lanza a favor de la población: «Cabe decir que estos datos no representan la totalidad de la ciudadanía. La mayoría tiene un comportamiento cívico, pero las consecuencias de estos actos las acabamos pagando todos».
A la vez, asegura que desde el consistorio se están poniendo «todos los recursos necesarios para tener unos barrios 10 y en este modelo de ciudad no tienen cabida los que ensucian». Por este motivo, defiende que el objetivo de la campaña de sensibilización ‘Prou brossa fora del contenidor!’ y de las actuaciones por parte de la Guardia Urbana son «para tener una ciudad más limpia».
La campaña impulsada desde el Ayuntamiento para acabar con estas malas prácticas que ensucian la ciudad y dan una mala imagen ha seguido dos líneas. Por un lado, una informativa con cartelería en la vía pública y mensajes a través de las redes sociales. Por el otro lado, la Guardia Urbana ha desplegado dispositivos con agentes de paisano y drones con el fin de localizar y denunciar a los incívicos en el momento que abandonan los desperdicios fuera del contenedor.
Servicio extraordinario
Con el fin de dar respuesta al incivismo el Ayuntamiento destina los 895.000 euros a cuatro servicios de limpieza extraordinarios. El más costoso, la recogida de voluminosos abandonados, que recoge de noche aquellos residuos voluminosos para su posterior tratamiento, con un coste anual de 279.000 euros.
En segundo lugar, el servicio de pre-recogida, que retira todos los residuos acumulados en torno a las islas de contenedores de recogida domiciliaria antes del paso de los camiones recolectores, para evitar que el servicio de recogida regular encuentre impedimentos. Esto supone un coste de 235.000 euros.
En tercer lugar, el repaso y vaciado de las papeleras y puntos de ubicaciones de los contenedores, retirando cualquier residuo depositado en la vía pública, con un coste de 199.000 euros al cabo del año. Finalmente, el mantenimiento del estado de limpieza, que se encarga de retirar los residuos grandes y pequeños voluminosos de la vía pública y los alrededores de los contenedores. Este servicio tiene que dedicar el 40% de su actividad al incivismo y supone un gasto de 77.000 euros anuales.
Por este motivo, el Ayuntamiento hace un llamamiento a la población para evitar estas infracciones que suponen un coste añadido para todo el mundo. Además, recuerdan que en el caso de los residuos voluminosos el consistorio dispone de un servicio de recogida. Este se puede solicitar a través de la página web serveis.reus.cat/voluminosos/ o llamando al 977 01 00 10.
Endurecimiento de las sanciones por incivismo
Por otro lado, dejar o depositar escombros en la vía pública pasó de los 300 a los 625 euros de sanción. Además, en los casos de reincidencia estas multas aumentaron hasta los 600 y 750 euros respectivamente. Un endurecimiento de las sanciones que, junto con los dispositivos de la Guardia Urbana para detectar vertidos ilegales, suponía una muy mala noticia para los infractores habituales.