Movilidad
Casi la mitad de los usuarios de la Ganxeta de Reus tienen menos de 30 años
La bicicleta compartida ha superado los 115.000 viajes acumulados desde su estreno

Se realizaron campañas informativas en los institutos para presentar el servicio.
La Ganxeta ya hace un año y medio que circula por las calles. En este tiempo, se han acumulado 116.195 viajes, según datos aportados por el Ayuntamiento de Reus, actualizados a 4 de agosto. En estos momentos, hay 3.799 usuarios activos. Uno de los datos más significativos es que un 44,87% de estos son menores de 30 años.
De hecho, el servicio de bicicleta compartida ya se concibió con la voluntad de ofrecer a los jóvenes una alternativa de movilidad sostenible. Desde el principio, está activa la modalidad de suscripción Ganxeta Jove, disponible hasta los 29 años. Tiene un coste de 3 euros al mes.
Asimismo, se decidió reducir la edad mínima para circular con este sistema, ofreciendo la posibilidad a los adolescentes a partir de los 14 años. «Acercamos la Ganxeta a los adolescentes y jóvenes, colectivos clave para la apuesta presente y futura de ciudad para la movilidad sostenible, la ciudad verde y la lucha contra el cambio climático», expresó el presidente de Reus Mobilitat i Serveis, Daniel Marcos, cuando se hizo efectivo el cambio. Hay que recordar que, para menores de 16 años, el uso de casco es obligatorio.
El cambio de la normativa y la expansión del público estuvieron acompañados de una campaña informativa en los institutos para dar a conocer el servicio de bicicleta compartida entre el alumnado. Además, la movilidad fue el eje central de una de las ediciones del Consell d'Infants.
En la sesión de audiencia pública, en junio del 2024, los jóvenes pidieron que la Ganxeta estuviera al alcance de todo el mundo para poder hacer uso. No sólo se referían a la ampliación de las estaciones y los aparcamientos, ni al despliegue de nuevos carriles bici para conectar las escuelas con el centro, sino también que hubiera «de todas las medidas», adaptadas a diversidad funcional y que se pudieran desanclar sin requerir un teléfono móvil.