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Energía

APIR prepara una nueva convocatoria para la compra colectiva de energía en Reus

Las empresas de los polígonos industriales trabajan para negociar conjuntamente con las comercializadoras energéticas

L'APIR confia que la convocatòria ajudara a les empreses en un moment de crisi energètica.

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La Asociación de Empresarios y Propietarios de los Polígonos Industriales de Reus (APIR) abrirá, por segunda vez, una convocatoria para la compra colectiva de energía, después del «éxito» de la primera licitación. El objetivo de esta es sumar la máxima demanda de energía de las empresas de los polígonos para presentarse como un único cliente ante las comercializadoras energéticas y, así, poder negociar unas mejores condiciones. El concurso que se publicó en el 2020 permitió pactar un precio fijo que hizo que las empresas pudieran ahorrar hasta 210.000 euros. El actual aumento de precios hará cambiar las bases de la convocatoria, en la cual no habrá permanencia, dado que la actual crisis energética se podría estabilizar antes de un periodo fijado, complicando la creación de un contrato nuevo con otras condiciones.

«La situación energética ha cambiado mucho en dos años. La pasada convocatoria nos permitió generar un beneficio muy alto para las empresas, en la siguiente queremos luchar por seguir consiguiendo un ahorro a la hora de negociar como grupo, pero sin un precio fijo», explica Vicenç Ferré, presidente de la APIR. El propósito de trabajar bajo un mismo paraguas es negociar con las comercializadoras de manera que el precio que indique el Operador de Mercado Eléctrico Designado (OMIE) no se supere en grandes cantidades: «Cuantasmás empresas, más capacidad de negociación», detalla Ferré.

Las 13 sociedades que se unieron en la primera licitación de compra agregada de energía con el objetivo de reducir el gasto en electricidad, alcanzaron una rebaja del precio de la luz del 20%. Además, la energía suministrada ha sido 100% renovable durante los dos años y ahora, en la próxima licitación, se seguirá con este requisito, ya que «esta responsabilidad social es cada vez más pedida por todas las empresas y sus clientes», asegura el presidente de laAPIR.

Lo que sí que se modificará es el establecimiento de un precio cerrado de consumo, ya que «hace dos años el mercado era más estable, pero ahora difícilmente te dan un precio fijo y que no sea bastante elevado. Ahora el precio será indexado, marcado por el OMIE, pero se negociará para que siga habiendo ahorro», explica Ferré.

El anterior concurso fue para dos años y ahora llega a su final. Para Ferré «ha ido bien que lo firmáramos para dos años, porqueeste último hemos vivido una gran subida de precios, pero las empresas que se unieron han seguido pagando lo mismo». La permanencia de este próximo contrato será inexistente, de manera que, si el mercado se estabiliza, «podremos trabajar para hacer otra negociación y no tener que esperarnos un cierto tiempo», detalla al presidente de APIR.

La pasada convocatoria se llevó a cabo a finales del 2020, cuando el precio de la energía todavía estaba en mínimos históricos; las condiciones que se pactaron en aquel momento fueron un precio fijo. Entonces el precio de la energía rondaba los 45,89 euros por megavatio hora y garantizaba suministro de energía 100%, renovable por dos años. A raíz de la crisis energética, el precio medio a partir de diciembre del 2020 hasta septiembre de este año ha sidosobre una tarifa de 127,80 euros por megavatio hora. Por lo tanto, estas condiciones han supuesto para las empresas un ahorro medio de más de 210.000 euros en total.

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