Nace la Asociación de Vecinos de la plaza de la Paz en Reus para «parar el incivismo»

Vecinos de la plaza de la Cultura de la Paz, la calle de Pau Font de Rubinat y el de Sor Lluïsa Estivill se han organizado en una asociación para «poner fin al incivismo, la suciedad, los ruidos, las peleas, las pintadas y la inseguridad que venimos sufriendo desde hace años». En esta área viven «cerca de 500 personas» que «cada día, vemos grupos de jóvenes que se reúnen en la plaza y generan enfrentamientos y delincuencia», tal como concreta al presidente de la nueva Asociación de Vecinos de la plaza de la Cultura de la Paz, Víctor Muñoz, que lamenta que es un punto de la ciudad que «ya no hace honor a su nombre» y que «cuando compramos los pisos, nos lo presentaban como un lugar muy tranquilo» sin embargo «hay propietarios que se han tenido que vender su casa y marcharse porque eso ya no se aguanta; hace falta que devuelva la calma».

La entidad quiere que en la zona, donde ahora hay juegos infantiles y otros elementos, se le aplique «una reforma urbanística» y «se coloquen obstáculos» con el fin de convertirla en una «plaza dura, más similar a la de la Llibertat». También se queja de problemas vinculados a algunos de los bares, que «no respetan las normas». Y apremia al Ayuntamiento a hacer llegar el sistema de videovigilancia en la plaza, que se encuentra dentro de la tercera fase del plan de despliegue de cámaras conectadas con la Guardia Urbana, porque«aunque seguramente no sea la solución llena, sí que puede ayudar». En relación al papel de la policía, el presidente expresa lo «agradecimiento» en el cuerpo, que «acude y actúa cuando llamamos», pero pide que «intervenga de oficio, sin que nos toque vigilar y avisarlos», e incrementar la presencia de agentes. «La plaza tiene cuatro accesos, muchos rincones y ángulos desde donde mirar y, cuando llegan los vehículos de la policía, lo que haya se disuelve», dice Muñoz, que apunta «cuestiones de drogas» y «botellón ».

Todo lo atribuyen los vecinos a la actividad de estos «jóvenes, la mayoría menores de edad», que «lo invaden todo y desplazan en el resto de usuarios». Muñoz pone un ejemplo: «Hace poco, jugaban a fútbol y se les coló la pelota en un balcón; escalaron por la fachada, saltaron al balcón y la recogieron, con el peligro que tiene y el miedo que uno puedes mirar por la ventana y encontrarse a una persona en casa». De hecho, «también tuvimos que pedir que nos sacaran un columpio adaptado porque se sentaban y lo colgaban». La entidad sostiene que «aquí hay familias con niños, pero no pueden utilizar el espacio de juegos porque están ellos». «A veces, vuelven las papeleras y dejan la basura al suelo; son muchas cosas que no entendemos y no se acaban», detalla Muñoz, que sospecha que algunos «han venido de otros puntos donde hay más presión, como la Sardana». Los vecinos ya habían entrado más de 50 firmas de queja al Ayuntamiento.

En contacto con los que viven allí

La Asociación de Vecinos de la plaza de la Cultura de la Paz se constituyó hace quince días, hechos los trámites pertinentes, porque «queremos soluciones definitivas». La entidad tiene también la junta Marcos Villa (tesorero), Josep Margalef (vocal), José Pizarro (secretario) y Rafael Fernández (vocal). Y ha habilitado la dirección atveins@avculturadelapau.cat , donde atiende consultas.