Diari Més

Medio Ambiente

Ecologistas de Cunit convocan una manifestación para detener la urbanización de un bosque autóctono

La entidad Sos Natura se opone a la construcción de un polígono, un hotel y varias viviendas en la zona de Miramar

Imagen aérea del sector sur de Miramar.

Ecologistas de Cunit convocan una manifestación para detener la urbanización de un bosque autóctonoGrup Ecologista del Vendrell i el Baix Penedès

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El colectivo ecologista Sos Natura Cunit ha convocado una manifestación contra un proyecto urbanístico que prevé la tala de uno de los últimos bosques de especies autóctonas que quedan al municipio. Las obras afectan en la zona de Miramar, donde hay más de 91.000 m2 de espacio forestal calificado como urbanizable. Los activistas denuncian que el Ayuntamiento urbanizará el espacio para facilitar que inversores privados levanten un polígono, un centenar de viviendas y también un hotel. «Cunit ya es un mar de cemento y, si destruyen este bosque, prácticamente no tendrá ninguno atractivo natural», lamenta a ACN una portavoz de Sos Natura, Rosa Saumell. La protesta del domingo está convocada a las 11h a la rotonda de la C-31 con la calle del Ebre.
«En Cunit no necesitemos más casas; actualmente hay más de 450 viviendas vacías», se exclama Saumell, que también rehúsa la necesidad de construir un nuevo polígono industrial-comercial «con un modelo que tenía éxito en los años 70, pero no en el 2021». Según los activistas ecologistas, la urbanización de la zona de Miramar «acabará pasando factura al pueblo», tanto por la pérdida de espacio natural como por la falta de permeabilidad del sol en casos de aguaceros, ya que auguran que agravará las inundaciones que ya sufre la zona más baja de Cunit en caso de temporal.

Sos Natura Cunit exige al Ayuntamiento que reconsidere la tala del bosque de Miramar y lo insta a afrontar una reforma del POUM que blinde este espacio, así como también la Plana del Castell o el camping que hay junto a la playa. «Tenemos un POUM modificado del 2006, en pleno boom inmobiliario, pero ahora vivimos un momento sanitario, económico y social que no tiene nada que ver», recalca Rosa Saumell.

Los activistas sostienen que «Cunit no se puede permitir el lujo de urbanizar los últimos espacios verdes del municipio», y acusan al consistorio de dar luz verde a los proyectos de los promotores inmobiliarios con el fin de poder obtener ingresos adicionales a través de los permisos de obras e impuestos. «Ven un caramelo de ingresos a los cuales les interesa para enjugar la deuda acumulado de hace años», aseguran.

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