Dana Alice
Alcanar reclama que se condone el sobrecoste de gestionar «ingentes» cantidades de residuos de la dana
Roig dice que la exención del canon de vertedero no evitará el incremento de facturas por el exceso de basura en la emergencia

Montones de elementos dañados por los aguaceros en Alcanar Platja.
En los pueblos afectados por los aguaceros del Montsià todavía se recogen los residuos que ha generado la nueva catástrofe climática. En Santa Bàrbara y Alcanar quedan pilas de la basura acumulada, que las brigadas municipales retiraban de casas, calles, caminos y carreteras durante la emergencia. Electrodomésticos, muebles, libros, utensilios personales y también mucha tierra mezclada con otros elementos se amontonan en descampados habilitados como vertederos provisionales, mientras se trasladan a los centros de reciclaje de Mas de Barberans o Tivissa. El alcalde de Alcanar, Joan Roig, pide a la Agència de Residus que condone la facturación de gestionar un exceso de basura, porque el canon de vertedero que han perdonado es sólo una parte «ínfima» de todo el aumento del gasto.
En Alcanar, los operarios encargados de la recogida de basura se han tenido que hacer cargo los últimos días de hacer recopilación de «toneladas y toneladas» de desperdicios que las barrancadas y las inundaciones han generado en el pueblo. El alcalde Joan Roig lamenta que, además del esfuerzo «ingente» que requiere gestionar los residuos durante la emergencia con los operarios municipales, después tengan que pagar un incremento del gasto por la gestión de residuos «intolerable».
Como ejemplo, señala los 300.000 euros por gestión de residuos que pagó el municipio en los aguaceros de 2021, la segunda de cinco catástrofes por lluvias torrenciales que ha sufrido el pueblo los últimos siete años. «Es casi nuestra capacidad de inversión anual y la tuvimos que invertir en la gestión de los residuos de la emergencia», ha remarcado Roig. «Eso tensa de una forma exagerada el presupuesto municipal», ha insistido.
En Santa Bàrbara, con la barrancada de 2023 también recibieron de 14.000 euros de factura por la gestión y recogida de residuos extraordinarios, «que no era realmente poco», como apunta el alcalde Josep Lluís Gimeno. A través del servicio que tienen delegado al Consell Comarcal del Montsià, se alegó que este importe tenía que estar incluido en el canon que se paga a la empresa gestora de los residuos y se les condonó. Gimeno confía que, ahora, con la resolución de la Agència de Residus de Cataluña (ARC) que los ayuntamientos no tendrán que pagar nada y que «será totalmente gratuito».
Un canon insuficiente
La ARC tramita una exención para evitar que los ayuntamientos tengan que abonar 70 euros por tonelada entrada en los depósitos controlados, si son residuos consecuencia de las inundaciones. Ahora bien, Roig alerta que este canon «es una parte ínfima» de lo que se pagará. El alcalde de Alcanar pide a la Agència de Residus que haga «una reflexión» y que se condone el incremento de gasto por la gestión de residuos extraordinarios, o al menos una parte importante. «Que haga un esfuerzo económico para que todo este peso económico o financiero no recaiga sobre los ayuntamientos», ha pedido, ni haya que esperar ayudas de las administraciones superiores para hacer frente a este incremento del gasto. «No los estamos generando porque queramos hacer una reforma integral del municipio», ha ironizado el alcalde de Alcanar.
Selección de residuos
Los ayuntamientos pagan por el transporte, la entrada al vertedero y por la selección y tratamiento de los residuos. La resta tiene un coste más alto, pero en situaciones como las inundaciones, con «toneladas de residuos» arrastrados y mezclados por el agua y el barro o que se tienen que retirar rápidamente por salubridad, Joan Roig señala que no hay margen para hacer «recogida selectiva». «Hay tierra, piedra, restos vegetales, hay muebles, escombros de las casas... Está todo mezclado y cuando se saca de las casas no te puedes dedicar a hacer esta selección», ha insistido. «Después -la elección- se tiene que hacer en el vertedero del Mas de Barberans, e incrementa el importe final. Entre las cantidades y el proceso de gestión, llegan a los ayuntamientos unas facturas que para nosotros son insostenibles», ha denunciado el alcalde de Alcanar.
Con la experiencia de otras barrancadas, en Santa Bàrbara habilitaron un vertedero provisional con contenedores en la plaza de toros. Los operarios municipales trasladaron todos los residuos, con la colaboración de vecinos con vehículos y maquinaria, y han intentado separar tierras y restos vegetales, de residuos diversos y electrodomésticos. En la zona todavía quedan por trasladar uno de los contenedores de electrodomésticos y uno de tierras y restos vegetales.
En la Ràpita, en la parte alta del campo de fútbol también se habilitó un centro de reciclaje provisional que ya se ha clausurado. Según fuentes municipales fue «una salida de emergencia» para no colapsar la estación de transferencias. Los vecinos tenían «muy material estropeado» y había que retirarlo de las puertas de las casas y de las calles, rápidamente. Empresas del sector coordinan la retirada de la basura acumulada en este descampado. Desde el consistorio rapitenc, celebran que la Agència de Residus los deje exentos de pagar el canon de vertedero, «aunque no habrían tenido problema a pagarlo porque el objetivo era liberar a los ciudadanos de los residuos de la manera más efectiva». También confían en que se produzca ningún sobrecoste en la factura de la basura.
200 toneladas en una semana
Según fuentes del COPATE (Consorcio de Políticas Ambientales de las Terres de l'Ebre), el incremento de la entrada de toneladas de residuos en los vertederos es muy grande. Habrá un coste extraordinario que el Consorcio confía que las administraciones superiores acaben financiando con ayudas a los ayuntamientos, como ha pasado en episodios anteriores.
Desde los aguaceros del 12 de octubre hasta este martes, han entrado a los vertederos 189 toneladas de residuos extra, de sólo cuatro pueblos. Se han hecho más de 34 viajes de transporte y está previsto que esta semana acabe la retirada de la acumulación en zonas habitadas, con los medios que se dispone del servicio de centros de reciclaje . Se ha retirado 37,28 toneladas en la Ràpita, 50,52 toneladas en Godall y 25,88 toneladas en Alcanar. Santa Bàrbara con 75,96 toneladas está a un 90% de completar la retirada.