Sociedad
'La Perla' de Amposta muestra el atractivo del río Ebro y la fachada fluvial a locales y visitantes
Durante las vacaciones de Semana Santa, el barco turístico aumenta la frecuencia de rutas

La Perla, el barco eléctrico que navega por el río Ebro, en el embarcadero de Amposta
La embarcación eléctrica de Amposta La Perla ya navega por el río Ebro, una propuesta que pretende mostrar el atractivo de la fachada fluvial a locales y visitantes. La nave recorre una docena de millas donde se explica a los navegantes detalles sobre la naturaleza, la cultura y la historia de la ciudad, el Delta y las Terres de l'Ebre.
«Muchos ampostins y ampostines, a menos que hayan formado parte del club náutico, no han visto la fachada fluvial desde el agua», ha apuntado el patrón Alfred Rieres. El barco turístico, que funciona con paneles solares y baterías eléctricas, forma parte del Plan de Sostenibilidad Turística y se ha pagado con parte de fondos europeos. Durante la Semana Santa, el barco turístico ha aumentado la frecuencia de rutas y ofrecerá tres diarias.

Alfred Rieres, patrón de 'La Perla', en uno de los viajes de la embarcación
Las rutas de La Perla empiezan y acaban en el embarcadero de Amposta, con un recorrido que pasa por puntos emblemáticos como el puente colgante de la ciudad o la isla de Sapinya. A lo largo de todo el trayecto, la tripulación puede observar el paisaje que rodea la fachada fluvial acompañado de explicaciones sobre cultura e historia del entorno al Delta del Ebro.
Habitualmente se hace una expedición diaria, si bien durante la Semana Santa se incrementan hasta tres rutas en el día de una hora y media de duración cada una. Con una capacidad para cerca de 120 personas, se augura una buena afluencia de público.
La característica principal que diferencia este barco turístico otros que pueden navegar por el río Ebro es la sostenibilidad; la embarcación cuenta con placas solares al techo, además de baterías eléctricas, que garantizan la movilidad de la nave. La autonomía de La Perla es de unas cuarenta millas, el que equivale a poco menos de ochenta kilómetros. «Me he quedado parado por las ventajas que tiene; como por ejemplo el poco ruido y el relax que aporta navegar con este barco», ha indicado el patrón Alfred Rieres.
Un barco eléctrico para «vivir cara en el río»
La embarcación eléctrica empezó a navegar ahora hace diez días y según la regidora de Turismo y Ferias, Inés Martí, durante los primeros días, la media de público ronda el 50%. De cara en los días festivos de Semana Santa, se prevé un incremento de reservas, especialmente por parte de visitantes. La propuesta busca a la vez «abrirse al río», para mostrar el patrimonio natural, histórico y cultural a la ciudadanía. Se trata de un punto de vista, el de dentro del río, que permite ver desde otro enfoque la fachada fluvial de Amposta. «Queremos vivir de cara en el río, que tenga actividad, queremos enseñar todo el potencial y riqueza que tiene», ha aseverado Martí.
A pesar de la novedad, el patrón de la embarcación ha sugerido no hacer un único viaje, sino aprovechar la propuesta para ver los cambios que vive el Delta a lo largo del año. «El Delta es cambiante, el cultivo del arroz ya cambia el río y la gracia es ir viniendo», ha añadido. En este sentido, el Ayuntamiento trabaja para añadir nuevas rutas fluviales. Concretamente, se está trabajando para incluir un nuevo itinerario sobre memoria histórica que podría ser incluida este año en el abanico de propuestas de La Perla.

Una familia de Amposta se fotografía en 'La Perla', la embarcación eléctrica que navega por el río Ebro