Tortosa cierra el Centro Cultural de la antigua SAMO por deficiencias en seguridad y accesibilidad

El Ayuntamiento de Tortosa ha cerrado el Centro Cultural de la antigua fábrica SAMO sin fecha de reapertura. El equipamiento incumple la normativa de seguridad e incendios, accesibilidad y eficiencia energética. El consistorio encargó un informe a una consultoría externa hace unos meses al detectar algunas deficiencias.

El espacio cultural se inauguró y reformó a finales del anterior mandato. El alcalde de Tortosa, Jordi Jordan, ha adelantado que la inversión necesaria para adecuar el centro a las normativas puede llegar a los 256.000 euros y que propondrá una modificación presupuestaria para llevar a cabo la inversión. «Actuamos con responsabilidad y ante una nueva chapuza fruto de las prisas y la manera de hacer de la señora Roigé», ha dicho el alcalde.

El alcalde de Tortosa, Jordi Jordan, acompañado de la teniente de alcalde y regidora de Cultura, Mar Lleixà, ha explicado que en el centro cultural de la SAMO «se han detectado importantes deficiencias en materia de seguridad, accesibilidad y también eficiencia energética». Concretamente, la sala cultural no dispone de sistemas de detección y alarmas antiincendios. A pesar de que se ha encargado un informe a los Bombers de la Generalitat, habrá que implementar sistemas de extinción, bocas de incendio equipadas y extintores en la sala; habrá que condicionar rutas de evacuación con salidas de emergencia adaptadas y previstas, «que tampoco existen»; y mejorar «la resistencia al fuego de la estructura» con pinturas ignífugas «para proteger las superficies de los posibles daños».

En cuanto a la accesibilidad, Jordan ha dicho que hay que adaptar las rutas interiores del espacio para garantizar el acceso sin barreras arquitectónicas, señalizarlas y adaptarlas para personas con movilidad reducida, y construir lavabos adaptados, como requiere la normativa, «que tampoco se hicieron», según ha señalado el alcalde. Finalmente, en materia de eficiencia energética, habrá que ampliar y adecuar toda la instalación eléctrica del edificio y mejorar la climatización y la ventilación según la normativa vigente.

El coste para cumplir la normativa

Estas son las principales carencias que los informes técnicos municipales han extraído del proyecto de ingeniería, de más de 500 páginas, encargado en noviembre a una consultoría externa por unos 6.000 euros. Jordan ha detallado que las actuaciones necesarias para reabrir la sala cultural costarán un mínimo de 37.000 euros, si se reduce el aforo a menos de 100 personas, un máximo de 256.000 euros si se quiere un aforo de más de 370 personas, o una inversión de 97.500 euros si se limita el aforo a 299 personas.

Jordan ha dicho que propondrán una modificación presupuestaria para llevar a cabo estas obras «mínimas» en materia de seguridad, accesibilidad y también eficiencia energética en el centro de la SAMO y cumplir «la actual normativa». «Le pedimos a un tercero y, desgraciadamente, el anterior gobierno no cumplió con las equipaciones que inauguró, insisto, antes de las elecciones y deprisa y corriendo», ha lamentado. El alcalde también ha avanzado que se está analizando la adjudicación y recepción de la reforma del espacio cultural, «si se inauguró dentro del plazo y en la forma oportuna» y «si realmente se hizo todo de manera correcta».

Además, ha anunciado que el gobierno municipal iniciará los trámites para declarar la antigua fábrica SAMO como un Bien Cultural de Interés Local (BCIL) para garantizar «la protección» de la equipación y para acceder «a futuras líneas de subvenciones y de ayudas para edificios catalogados».

De fábrica de gafas a centro cultural

El Centro Cultural de la antigua fábrica SAMO de Ferreries se inauguró la primavera de 2023. El anterior equipo de gobierno de Junts per Tortosa adquirió las naves del barrio de Ferreries que habían ocupado, primero, la empresa textil de fabricación de camisetas Saturnino Sanz Martorell, SAMAR, entre el 1927 y el 1972, y después la fábrica de gafas SAMO e Indo, que ocupó el edificio a partir del 1974 y hasta que cerró, en 2010. Se invirtió más de 202.000 euros, según ha recordado el alcalde.

La equipación se abrió con el nombre Espacio Joan Moreira, en homenaje al conocido folclorista tortosí. En el mes de noviembre del año pasado, el plenario aprobó la propuesta de la CUP de retirar el nombre de Moreira al espacio, puesto que con el testigo del folclorista, el periodista Sebastià Campos Terré fue juzgado y ejecutado por el régimen franquista desprendido de la Guerra Civil Española.

La rehabilitación de la sala polivalente, con capacidad para 300 personas, completó una reforma del complejo social y cultural, donde ya se habían arreglado varios locales para entidades municipales. También en esta equipación hay el espacio de Temps x Tu, un servicio de acogida gratuito de niños de 4 a 12 años que ayuda a liberar tiempo a las familias, sobre todo a las madres. El cierre no afecta los locales de las entidades ni el espacio de Temps X Tu, a pesar de que el consistorio estudia el traslado de este servicio «para mejorar su funcionamiento».

La SAMO cierra coincidiendo con las obras de ampliación del Teatro Auditorio Felip Pedrell y habrá que «mover» los espectáculos y actuaciones que se habían programado al nuevo centro de Ferreries. En los últimos meses, el Ayuntamiento dice que ya ha «restringido» el aforo a 200 personas mientras esperaba los resultados de la consultoría y ha anunciado el traslado de los espectáculos previstos para los próximos días a otros espacios de la ciudad. Es el caso del concierto de las Juventudes Musicales, que se hará en el Centro Cívico de Ferreries, o el Maratón de Donación de Sangre que se hará en el Campus del Ebro de la URV.

Junts recrimina más inversión a la SAMO

Desde Junts per Tortosa han defendido que el inicio de la adecuación y reforma de la antigua fábrica de gafas en una sala polivalente disponía de un proyecto hecho por un arquitecto y con la supervisión de los servicios técnicos municipales, y que en el anterior mandato ya acogió algunas actividades, como el Foro Económico y el Maratón de Sangre, porque «la sala que ahora cierra el Ayuntamiento tenía la accesibilidad y la seguridad garantizada».

Junts asegura que el informe externo se remitió al Ayuntamiento en el mes de diciembre y que la sala se tendría que haber cerrado entonces «si hubiera carencias graves en el edificio». El grupo defiende que «se tenía que continuar invirtiendo» en la equipación, «como se comprometieron a hacer si continuaban gobernando». «Hace 22 meses que Movem-PSC y ERC gobiernan la ciudad y no han invertido ni un euro ni han hecho nada», recriminan al equipo de gobierno. El principal grupo de la oposición acusa el gobierno municipal de tener la ciudad «estancada y paralizada».