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Los agricultores empiezan a utilizar drones para sembrar los campos de arroz del delta del Ebro

La tecnología aérea evita los problemas de acceso con los tractores a las zonas de pantanales y con surgencias de agua

Un dron sembrando con semillas de arroz un campo próximo a la población de la Ràpita.

Un dron sembrando con semillas de arroz un campo próximo a la población de la Ràpita.ACN

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El monopolio de los tractores a la hora de sembrar los campos de arroz del delta del Ebro podría tener los días contados. El uso de drones para tareas como esta o la de arreglar los arrozales empieza a abrirse paso a partir de esta campaña. La tecnología aérea permite, principalmente, evitar los quebraderos de cabeza a la hora de acceder en determinados campos del Delta, especialmente aquellos situados en zonas de pantanales, donde a menudo los tractores quedan estacados. Después de un tiempo de pruebas en seco para perfeccionar el sistema, la empresa ebrense Persual Drone se ha convertido en la primera a ofrecer este servicio a los campesinos del territorio. Durante la actual campaña prevén sembrar unas 50 hectáreas pero confían en que la demanda crecerá considerablemente los próximos años.

Equipado con un depósito para transportar 50 kilos de semillas de arroz por sembrar, el dron DJI Agras T50 es el encargado de hacer el trabajo que, hasta estos momentos, todavía asumen los tractores. Los mismos campesinos, acostumbrados a repetir pausadamente la operación de vaciar los sacos dentro de las sembradoras enganchadas a los vehículos agrícolas, tienen que trabajar ahora bastante más rápido. Justo después de haber esparcido la semilla a lo largo de una franja de unos 6,5 metros de ampliada y unos 400 de longitud, el dispositivo vuelve vacío a la base al cabo de mucho pocos minutos.

Hace tiempo que en el delta del Ebro se ensaya el uso de los dispositivos voladores en los cultivos para aplicaciones de productos líquidos autorizados por la normativa. Pero hasta este año no se habían introducido los sólidos -sea semillas o adobos. Capaz de cubrir tres hectáreas por hora aplicando 185 kilos de entonces por hectárea, el dron ofrece rendimientos «muy competitivos» delante de las cinco hectáreas por hora de los tractores y sembradoras convencionales, apunta Alexis Ripoll, director operativo de Persual Drone.

La empresa lleva meses trabajando en la forma de aplicar semillas o adobos sólidos desde el dispositivo aéreo teniendo en cuenta todas las variables. Se han tenido que hacer pruebas para calcular verificar la anchura de cada pasada, los ángulos de los discos y diferentes variables. Según Ripoll, además, el hecho de que cada tipo de semilla requiera una calibración previa específica que se traslada al aparato permite ajustar la eficiencia de paso con variaciones relativamente bajas -unos 300 gramos en un campo de cinco hectáreas- respecto del método de cálculo tradicional para la siembra. «El dron tiene un ajuste mucho más efectivo y una finalización campo mucho más eficiente de los kilos que has tirado por hectárea», sentencia.

A pesar de eso, la gran ventaja que ven los campesinos, principalmente, es la posibilidad de poder acceder a los campos donde, actualmente, la entrada con tractores puede generar inacabables quebraderos de cabeza. Se trata, principalmente, de zonas de antiguos pantanales de colmillos o surgencias de agua que, sobre todo después de reiterados o intensos episodios de lluvia, es muy difícil de secar adecuadamente y donde los vehículos agrarios pesados que intentan transitar quedan entrampados. «Los agricultores piensan que si entran a sembrar se los quedará el tractores estacado con la sembradora y después hará falta retirarlo del campo», apunta Ripoll.

Menos daños en los campos y en los tractores

Uno de sus clientes, el arrocero Marc Balada, amplía este razonamiento. «Tienes menos daños porque por allí donde pasas haces daño y no haces tanta producción y no tienes problemas de estancamiento porque pasando con el tractor te hundes», apunta. Hundimientos que, a menudo, acaban con graves averías de los vehículos agrarios que obligan a hacer frente a costes de reparación muy elevados. Al mismo tiempo, la aplicación aérea permite hacer varias aplicaciones a lo largo del tiempo, especialmente en el caso del abono, para ganar efectividad.

Balada, miembro de una empresa familiar que gestiona y trabaja cerca de 800 hectáreas de cultivos en el delta del Ebro, cree que el uso de esta tecnología se consolidará y expandirá durante los próximos años, teniendo en cuenta las condiciones de los terreno y la eficiencia de esta tecnología. Hasta el punto que él mismo decidió estudiar por su cuenta para obtener el título de piloto de dron para poder, en algún momento, operar alguno de estos dispositivos a sus fincas. «Necesitas también el carné de piloto aplicador y conocer las normativas del parque natural del delta del Ebro porque tienes que pedir los permisos», clarifica.

«Todo el mundo nos ha dicho lo mismo: que nos preparamos porque si en el delta del Ebro se acepta será fácil que la gente lo pida», ha apuntado Ripoll. Así, una vez finalice en breve el proceso de la siembra del arroz, durante el cual prevén haber actuar en unas 50 hectáreas, los agricultores ya demandan el uso del dron para poder aplicar adobos sólidos en los arrozales, así como otras aplicaciones fitosanitarias autorizadas.

Adaptarse al parque natural y a la normativa

Según el director operativo de Persual Drone, la adaptación a esta nueva actividad no ha resultado especialmente compleja desde el punto de vista administrativo. Para sobrevolar cada finca del Delta donde trabajan tienen que pedir los correspondientes permisos en el parque natural y comprometerse a respetar los espacios protegidos, como lagunas y pantanales, así como la normativa al respeto. Estamos con contacto con el parque natural. Nos han abierto las puertas a hacer diferentes tipos de actividades. Es una máquina que ha venido para quedarse», ha cerrado Ripoll, a quien confía en que su experiencia sirva para fundamentar un «ecosistema de trabajo» circular entre trabajadores, campesinos y empresas del mismo territorio.

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