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Economía

Tres-mil hectáreas de viña en la Terra Alta, afectadas por la granizada

La zona más afectada de Batea y Caseres ya sufrió graves pérdidas por una tormenta violenta la vendimia pasada

Imagen de archivo de viña anegada de agua en la Terra Alta.

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Las tormentas y la granizada que cayó este miércoles por la tarde en la Terra Alta ha afectado hasta 3.000 hectáreas de viña en la zona entre Batea y Caseres. Los daños en las vides pueden suponer pérdidas de producción de entre el 30% y el 80% de uva dependiendo de la finca. La viña ya estaba muy despampada –se le saca hoja para favorecer la maduración de verano del fruto- y algunos campos se han visto muy perjudicados. Habrá que ver si las vides «cicatrizan» y si las acumulaciones de agua en los campos no traen problemas de mildiu. La zona ya sufrió graves pérdidas en las fuertes tormentas del septiembre pasado, cuando la granizada también afectó a las viñas en plena campaña de vendimia. Los daños se acabarán de cuantificar los próximos días.

Como ha apuntado el responsable de la viña y el vino de Unió de Pagesos en la Terra Alta, Marc Paladella, la zona más afectada está entre el municipio de Caseres y Batea hasta el río Algars, donde empieza el término municipal de Maella (Casp-Baix Aragó). La primera estimación es que la granizada ha afectado a unas tres mil hectáreas sobre todo de viña. «Depende cómo esté plantada ha afectado de una manera o de otra», ha apuntado. Pero el 90% de las viñas ya había retirado las pampas y ha sido un mal momento para que le caiga encima una granizada que Paladella ha descrito como «un huracán»

«Muy mal. La mitad de la uva está aplastada y estos granosse secarán y el resto se supone que podrán vendimiar, pero veremos porque la planta está muy machacada. No lo sabemos y si tenemos problemas de mildiu, no podremos tratar», ha advertido Paladella. En algunos puntos cayeron hasta 80 litros en menos de media hora. «El agua no drenará, al menos durante un par de días y no sabemos qué puede pasar», ha insistido.

Los truenos son habituales en la zona pero estas granizadas intensas pasaban cada mucho. «Llevamos tres años seguidos y no sé si es cambio climático o qué es, pero no es demasiado normal. Batea no era muyperjudicada con el granizoy ahora cada año cuando no es una cosa es otra», ha señalado el responsable del sindicato agrario. Los campesinos siguen cuantificando los daños, también en los caminos y bancales y en algunas explotaciones de olivo intensivo, donde ha hecho caer buena parte de las aceitunas al suelo. Todavía hay fincas donde no se ha podido acceder.

También en el municipio de Batea la tormenta tumbó algunos árboles y se sufrieron algunas inundaciones en bajos de viviendas y algún edificio municipal.

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