Unas 200 personas defienden en Tortosa la permanencia del monumento franquista a la batalla del Ebro

«Estamos contentos: pensábamos que en el mes de julio no vendría demasiada gente y nos hemos sorprendido gratamente porque hemos mantenido la asistencia a la otra concentración», ha valorado a la portavoz del Corembe, Consuelo Cordero, que también ha ejercido de conductora del acto. Con una puesta en escena discreta, los colectivos que defienden el monolito franquista y su reinterpretación han querido nuevamente reivindicar la 'mayoría' obtenida en la consulta de 2016, en los cuales la reinterpretación obtuvo dos terceras partes de los votos (5.755), pero con una participación inferior al 30%.

Varias personas sostenían carteles con las letras de «Salvemos elmonumento», el lema que ha presidido la concentración, convocada al paseo del Ebro de Ferreries. Justo al lado del río y a pocos metros del monolito, el portavoz del Corembe, Joan Otero, ha desgranado nuevamente las virtudes artísticas y ha asegurado que, originariamente, no fue diseñado para glorificar el franquismo y el fascismo. A esta tesis se ha sumado también el periodista Daniel Arasa en su parlamento.

Cordero, exconcejala del gobierno socialista que catalogó el monolito el año 2003, ha cuestionado también el papel del gobierno municipal de Juntos por Tortosa –actualmente PDeCAT-, a quien ha reprochado no respetar el resultado de la consulta y la supuesta mayoría de los partidarios del mantenimiento.

Alzada sobre un banco del mismo paseo cerca de la playa fluvial donde empezaron hace unas semanas las obras previas para la retirada, la portavoz del Corembe ha apelado a los partidarios que no se manifiestan públicamente a favor para que reivindiquen su posición. No sólo eso, también para que aporten recursos económicos para mantener la lucha jurídica a favor del mantenimiento del monumento. Durante el acto, los participantes han podido comprar las camisetas de colores azul oscuro y encarnado con la silueta del monolito diseñadas también para captar fondos.

«Nosotros no somos un partido político antisistema que nos gusta tener los recursos del sistema para ir en contra de la gente y para ir en contra de la minoría de gente que votó a la consulta del 2016. Somos gente del pueblo, de diferentes ideologías y diferentes creencias, que queremos luchar por un solo objetivo: que este monumento de la alcaldesa del Ebro sea reconocido como un monumento por la paz y la concordia en la ciudad de Tortosa y también en Cataluña», ha cerrado.