Fútbol
Cristóbal Parralo, nuevo entrenador del Nàstic de Tarragona
El andaluz, que subió el Racing de Ferrol a Segunda División, suple a Luis César en el banquillo

Cristóbal Parralo, en su etapa en el Racing de Ferrol.
Cristóbal Parralo es el escogido dirigir el Nàstic de Tarragona. El técnico andaluz sustituirá al despedido Luis César y cogerá las riendas de la conjunto grana con el objetivo de alcanzar el ascenso de categoría.
Parralo (Priego de Córdoba, 21/08/1967) aterriza en Tarragona después de cerrar el curso pasado una etapa de cinco temporadas en el Racing de Ferrol. El andaluz fue el líder de un proyecto exitoso en el club gallego que inició en la antigua Segunda B. Parralo guio al Ferrol en el estreno de la Primera Federación hasta el play-off de ascenso a Segunda División. Allí, su camino acabó después de caer derrotado por 0-1 contra el Nàstic de Raúl Agné en Vigo.
A pesar del golpe, el club gallego confió en él y, un año después, Cristóbal Parralo alcanzó el anhelado ascenso a Segunda en una temporada demoledora en la cual el equipo acabó primero clasificado. De hecho, en aquel equipo había un joven Jaume Jardí, que fue uno de los jugadores claves para el ascenso.
En el año del debut en Segunda, consiguió salvar en el equipo con una notable décima posición. El año pasado, cerró su etapa después de una mala dinámica de resultados que culminó con el descenso del equipo gallego en Primera Federación. En total, dirigió 164 partidos con el Ferrol.
Además, Parralo cuenta con experiencia a Segunda División entrenando en Racing de Santander, Alcorcón, Deportivo de la Corunya y Girona. También entrenó el juvenil A de la Damm, donde se formó como futbolista. En esta etapa de jugador, Parralo estuvo presente en el Barça de Johan Cruyff y fue campeón de la Champions. También jugó en el CD Logroñés, Oviedo, Espanyol y PSG.
Parralo se encuentra un Nàstic sexto clasificado con 14 puntos, con 4 victorias, 2 empates y 4 derrotas, que no ha definido su estilo de juego durante toda la temporada. Además, se encuentra en un equipo que acumula tres partidos sin marcar y generar más bien poco y es lo que más encaja con 14 goles en contra.