Fútbol
Pablo Fernández y Antoñín Cortés, la dupla de ataque del Nàstic que se alterna en casa y a domicilio
El asturiano ha marcado 10 de sus 13 goles en el Nou Estadi mientras que el andaluz ha golpeado más fuera

Los delanteros del Nàstic Pablo Fernández y Antoñín Cortés celebrando un gol.
El Nàstic de Tarragona tiene que ganar al Real Murcia este sábado para mantener vivo el sueño del ascenso. Por este motivo, el equipo se encomienda a la dupla de ataque que este año ha repartido muchas alegrías con un total de 23 goles entre los dos. Eso sí, cada uno brilla más en una situación concreta.
Pablo Fernández es un experto en el Nou Estadi. De hecho, diez de los trece goles conseguidos esta temporada han sido en Tarragona. El último fue el último sábado cuando salió para revolucionar el duelo contra el Real Murcia. Por otra parte, Antoñín Cortés coge la responsabilidad a domicilio, donde este año ha anotado seis de las diez dianas.
Los dos juntos se han convertido en una dupla que todas las defensas de la categoría temen. De hecho, el pasado sábado también se hizo valer su conexión, cuando Antoñín puso el centro desde la banda para que Pablo alcanzara el primer remate a puerta de toda la temporada. De hecho, sobre el césped se suelen compenetrar a la perfección, con Pablo Fernández atrayendo la atención de los defensores y luchando por abrir rendijas que Antoñín suele aprovechar.
Los dos están en un gran estado de forma. Pablo lo demostró el sábado y, Antoñín así lo ha hecho en el tramo final del curso. De hecho, en los últimos diez partidos de liga alcanzó 5 dianas, la gran parte a domicilio. Antoñín aparece con los escenarios en contra. Así fue en el campo acuático del Zamora, cuando su velocidad avanzó al Nàstic, y también dio esperanza al equipo a la hora de recortar distancias en las derrotas contra el Sestao River y el Ourense. En el caso de Pablo, sus goles han marcado tendencia. El Nàstic no ha perdido nunca si el asturiano ha marcado. En total, los grana han sumado ocho victorias y tres empates, contando el del último fin de semana.
Unidos o separados
La presencia de los dos jugadores en el once inicial ha entrado en discusión en el tramo final de la temporada y, sobre todo, bajo las órdenes de Luis César. El técnico gallego destacó en la rueda de prensa postpartido que no quería «quemar todas las naves» en el once inicial, dejando a Pablo como un revulsivo en el banquillo. De hecho, esta no es la única vez que ha sucedido esta temporada.
Con Dani Vidal, esta estrategia fue una tendencia en algunos partidos del tramo final de la temporada. Después de la lesión de Pablo contra la Zamora en el mes de marzo, el Nàstic transformó el 4-4-2 habitual en un 4-2-3-1 con Antoñín como único punta. Este volantazo tuvo efecto en Antoñín, porque marcó cuatro goles con esta nueva fórmula. De hecho, esta táctica funcionó a la perfección en duelos abiertos como contra la Ponferradina en casa, donde el Nàstic goleó por 5-1. Con todo, se vio más carencias contra defensas destacadas, como en la derrota contra Cultural Leonesa. Entonces, con Antoñín más controlado por la línea defensiva dura y el apoyo del medio del campo, el Nàstic se quedó sin opciones entre los tres palos. El último sábado pasó algo similar contra el Murcia, con un Nàstic con control, pero sin llegar a generar peligro real en la primera mitad.
El sábado es toda una final y será Luis César quien decida si quemar todas las naves con la dupla en el once, o guardarse sorpresas en el segundo tiempo.
Víctor Narro, el escudero predilecto de los dos atacantes del Nàstic
Los dos jugadores llegaron juntos este verano del Lugo con una relación de amistad profunda que también se ha visto en el terreno de juego. De hecho, esta se estrenó en el Anxo Carro en un partido que Narro repartió un gol tanto a Pablo como a Antoñín.
La conexión entre Narro y Antoñín fue crucial en la última victoria grana a domicilio. Entre los dos pusieron el 0-1 final contra el Celta Fortuna un lejano 1 de febrero. Además, esta también surgió en el último duelo de liga fuera de casa, pero con los papeles intercambiados. Entonces, Antoñín fue el encargado de asistir a Narro en el 2-2 contra la Segoviana.