Fútbol
El «paquete completo» del Nàstic
El Nàstic perdió a domicilio contra el Sestao River con deficiencias defensivas evidentes

El defensa del Nàstic, Gorka Pérez, intentando rehusar una de las acciones del duelo contra el Sestao River.
La película se repite una semana más. El Nàstic de Tarragona volvió a mostrar su peor cara a domicilio. De hecho, demostró que tiene dos de bien diferenciadas. Una que es capaz de todo y que salió adelante contra la Ponferradina, y la otra que es inoperante, que pierde su estilo y donde los errores predominan, la cual dejó una amarga derrota contra un rival en descenso. Los de Dani Vidal son capaces de lo mejor y de lo peor. Este es el paquete completo que todo nastiquer parece que tiene que comprar esta temporada.
A falta de siete jornadas para el final del curso, ya queda claro que este es el paquete completo del Nàstic. Un equipo con muchísimas virtudes en la parte ofensiva, con jugadores capaces de ser diferenciales en sus peores días, pero también un equipo blando y desesperante en defensa. Un gigante de pies de barro. De hecho, así lo reconoció, enfadado, el técnico grana Dani Vidal en el postpartido: «No podemos cometer los mismos errores durante toda la temporada si queremos estar arriba de todo». Vidal fue más allá y señaló que «el día de la Zamora fue similar. Allí defendimos todo el partido bien en el juego directo, con un error final. Era un partido similar, pero en este match no ganas un duelo y te driblan con facilidad. Molesta ver la misma película toda la temporada».
El Nàstic ya salió al duelo de capa caída. No pasaron ni cinco minutos y el primer error dio el primer gol al Sestao River. Leandro Martínez cogió la pelota por la derecha y encaró a Gorka Pérez. En este partido, el extremo ganaba, poco a poco, centímetros dentro del área hasta que Pérez tropezó con sus piernas y cayó vencido con la rodilla al suelo. Muy fácil: chute cruzado en el área pequeña y 1-0 en el marcador. La reacción del Nàstic no llegó hasta el minuto veinte de partido y fue por una individualidad. Antoñín Cortés está en estado de gracia y esta fue la única nota positiva de la conjunta grana en el País Vasco. El andaluz interceptó un tiro cruzado de Roberto Torres con un control orientado exquisito que acabó por culminar igualando el encuentro.
La pólvora del Nàstic empujaba el equipo, pero la alegría duró menos de un minuto. El Sestao sacó de medio del campo, llegó a la banda derecha, centró en el segundo palo y Diego Aznar remató hacia dentro con el 2-1. Así de fácil, tal como suenan estas palabras. Esta vez, fue la permisividad de Unai Dufur la que permitió que el delantero local chutara con comodidad. La situación no fue mejor en la reanudación. El conjunto local fue superior con pelota y sin y el único que sostenía el equipo era Dani Rebollo. El portero se volvió a reivindicar con tres parones de mérito, pero es humano y no lo podía parar todo. En un córner, el Sestao entró el tercero. La reacción del equipo no llegó hasta el minuto 88. Una jugada individual de Álex Jiménez, la cual culminó Antoñín, dio esperanzas, pero todo el mundo se tuvo que conformar con una merecida derrota.
Peores noticias en defensa
Pasó de todo al eje de la defensa. Antonio Leal no pudo jugar el partido por una indisposición que no lo dejó descansar en toda la noche. Después, los dos centrales disponibles erraron y, cuando salió Borja Granero, sufrió una lesión grave que, en palabras de Dani Vidal, «lo perdemos hasta el final de la temporada».
Esta dualidad grana, débil en defensa y poderosa en ataque, deja el Nàstic allí donde se merece: en una alcanzada lucha por la parte alta de la clasificación y dentro del play-off, pero sin la regularidad que exige ser un líder. Este es el paquete completo del Nàstic.