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Iker Fernández, el joven de la cantera que se ha hecho grande en el CB Tarragona
El base del filial es el tercer mejor triplista del grupo y ha cogido protagonismo en su primer año en la plantilla

Iker Fernández durante un duelo de este curso con el CBT.
El CB Tarragona ha conseguido su mejor inicio de curso de los últimos años. El equipo funciona como un reloj y se beneficia de sus grandes individualidades. En este punto ha entrado de lleno el base Iker Fernández. El joven de la cantera ha dado un paso adelante convirtiéndose en un jugador importante que ya decide partidos.
«No me sorprende. Siempre he confiado en el talento joven y desde que lo empecé a entrenar vi que tiene carácter para convertirse en un líder de grupo en el futuro», destacaba el técnico Toni Larramona. Él ya lo incorporó a la dinámica el año pasado en Segunda FEB. Entonces era un recurso que jugaba por término medio 8 minutos por partido. Este año, sin embargo, ha dado un paso adelante en responsabilidad disputando 21 minutos por término medio.
«Sabía que tenía nivel para decidir partidos, pero quizás no tan rápido. Es un jugador muy creativo y vertical y, sobre todo, muy descarado en su juego», apuntaba Larramona. De hecho, así lo hizo contra el Mataró para establecer él mismo un parcial de 8 puntos que facilitó el triunfo. Además, destaca sobre todo como triplista. Fernández se ha establecido como el tercer mejor lanzador del grupo con una media de acierto del 57%.
Fernández se sitúa como un engranaje más de un CBT que suma más individualidades. «Tenemos que seguir trabajando porque habrá partidos donde no estará tan acertado. Tiene una buena línea de proyección a seguir, quiere mejorar y tiene ambición sana, pero también competencia», decía Larramona.
En este punto, el técnico destacaba también que «Jan Campeny es uno de los mejores de la categoría, y también esperamos la entrada de Tomás Kohan, un base más analítico. Entonces, habrá una exigencia muy alta para ganar los minutos». De momento, Iker Fernández, como el CBT, está en un momento dulce a aprovechar para seguir creciendo.