Diez jugadores del Gimnàstic tienen contrato a pesar del descenso a Segunda B

El Gimnàstic de Tarragona jugará la próxima temporada en Segunda División B. Eso ya es una realidad después de los resultados que se produjeron este pasado fin de semana en la categoría de plata del fútbol español. Ahora, lo que hay que hacer es empzar a preparar la próxima campaña, con un proyecto suficientemente ambicioso como para ilusionar y, sobre todo, recuperar la categoría profesional.

La política de fichajes de los tarraconenses durante el pasado mercado de verano fue la de intentar conseguir jugadores cedidos y, por lo tanto, teóricamente de más calidad y a un coste inferior para, de esta manera, no hipotecar al club y conseguir montar una escuadra, en principio, más competitiva. Sí que llegaron muchos cedidos, pero la fórmula no ha funcionado. Una de las ventajas es que no habrá que rescindir muchos contratos.

Del total de futbolistas que forman parte de la plantilla grana, únicamente diez tienen contrato la próxima temporada. Esta circunstancia no significa que todos ellos se tengan que quedar. Nada más alejado de la realidad. Lo que sí está claro es que, a la hora de reconstruir la plantilla, los quebraderos de cabeza a la hora de dar bajas serán menores.

Por posiciones, tienen contrato con el Nàstic Bernabé Barragán en la portería; Pol Valentín, Mohammed Djetei y Salva Ferrer en defensa; Fali, Viti y Javi Márquez en el centro del campo; y, en la delantera, Brugui, Uche y Berat Sadik. Entre estos diez futbolistas, algunos se quedarán y, de otros, no. La idea del club es la de apostar por Bernabé como meta insignia a Segunda División B. Las ofertas que tendría el portero para continuar en Segunda A o, incluso, para dar el salto en alguno Primera División, serían un obstáculo. De momento, el Nàstic confía en su continuidad.

Salva Ferrer es un jugador con mucho cartel y no sería extraño que abandonara el Nàstic en el mercado de verano en calidad de traspasado. Hay un par de clubs de la máxima categoría del fútbol español que quieren ficharlo y su salida no está descartada.

Pol Valentín, que realizó un gran partido contra el Extremadura este sábado después de sustituir al lesionado Pipa, sería una de las apuestas para la próxima campaña en Segunda B. El caso de Djetei es diferente, ya que el Nàstic estaría abierto a un traspaso si llegara una buena oferta, con que es muy complicado que siga.

Fali, que tuvo una propuesta del Albacete para marcharse a mediados de temporada, finalmente se quedó y, por contrato, podría continuar. Ahora bien, pagando una pequeña cantidad podría abandonar el equipo durante el verano.

Viti ha cuajado una gran campaña y el Nàstic querría que siguiera. Ahora bien, sus actuaciones han levantado el interés de varios clubs, uno de ellos desde el extranjero, y el mediocampista podría hacer las maletas para continuar con su progresión. Javi Márquez quiere continuar, pero el Nàstic no podrá hacer frente a su elevada ficha en Segunda B y se tendrá que buscar una solución satisfactoria para ambas partes.

Arriba, Uche está en una situación similar. Con un año más, el africano no sería sostenible a Segunda División B por su elevada ficha y, en principio, el club tendría que encontrarle una salida, de no ser que quisiera bajarse el sueldo de forma sustancial para ayudar en el Nàstic a volver a categorías profesionales.

Brugui también tiene contrato y, aunque ha perdido protagonismo en la segunda vuelta, podría ser un futbolista muy válido en la 2019-20. El gerundense contaba con una oferta de la Extremadura para marcharse en el mercado de invierno, pero se le cerró el paso. No ha participado en los últimos meses con el Nàstic.

Finalmente, aparece el caso de Berat Sadik. El punta, que firmó este mercado de invierno por una temporada y media, tampoco es sostenible en Segunda B a causa de su sueldo. Se le buscará una salida pactada.