Fiesta en el Cielo 2025
Daniel Ventura: «El público saldrá boquiabierto, con la piel sacudida por los aviones y quizá con vocación de adentrarse en la aviación»
El director de la Festa al Cel explica las novedades de una cita que llega por primera vez a Salou y que reunirá más de 20 exhibiciones aéreas del 19 al 21 de septiembre en la playa de Llevant, con acceso gratuito

Ventura, el miércoles en Salou, con una réplica del Blériot XI, primer avión que voló en España el 1910.
La Festa al Cel llega por primera vez a Salou después de cinco años de parón. ¿Qué significa este regreso y por qué se ha escogido la capital de la Costa Dorada como nueva sede?
«Sobre todo es una gran alegría. Después de la pandemia nos quedamos huérfanos y sabíamos que Lleida-Alguaire era una etapa temporal, porque la Festa al Cel es un festival de mar, capaz de atraer a cientos de miles de personas. Salou es una de las pocas poblaciones capaces de asumir la complejidad de un evento así, por tierra, mar y aire. Están acostumbrados a grandes afluencias y esto nos lo ha puesto mucho más fácil».
Usted habló en la presentación de una edición histórica. ¿En qué se diferencia esta de las anteriores?
«Es la primera vez que el público podrá ver los aviones sin tener el sol de cara, porque las playas miran hacia el sur. También es la primera vez que tendremos una retransmisión en directo por TV3 [este domingo de las 12:30 h a las 14:05 h], y una de las primeras ocasiones en Europa en que se combina un festival nocturno con drones y aviones equipados con pirotecnia. Es un espectáculo que solo suele verse en lugares como Dubái o Estados Unidos».
¿Qué expectativas tienen de asistencia y qué impacto prevé para Salou?
«Hablamos de una previsión de 250.000 personas. Para Salou significa proyección internacional y reforzarse como destino turístico capaz de acoger grandes eventos».
¿Cuáles son, a su parecer, los momentos más espectaculares que el público no se puede perder?
«Todos, porque hemos querido hacer un gran escaparate del mundo de la aviación. Desde los Eurofighter o los F-18, hasta los campeones de España Juan Velarde y Cástor Fantoba, que hacen maniobras de precisión extrema. También el vuelo acrobático de los Aerosparx con pirotecnia, los Wing Walkers haciendo acrobacias sobre las alas y el vuelo de un Airbus 320 de Vueling, que vacío puede hacer maniobras sorprendentes. Y, por supuesto, el espectáculo nocturno con drones y fuegos, que será inolvidable».
El Sunset Airshow y la colaboración con PortAventura son grandes novedades. ¿Cómo se han gestado y qué aportan?
«Desde el principio ha habido mucha sintonía. Ellos han visto que es un evento con alcance internacional y han querido aportar su espectáculo de drones, llevado aún más allá con aviones y pirotecnia. Gracias a su patrocinio también hemos podido incorporar propuestas como los Aerosparx o los Wing Walkers. Es un salto cualitativo».
El cartel combina patrullas militares, aviones históricos y aeronaves innovadoras. ¿Cómo se conjugan tradición y modernidad?
«Lo que queremos es mostrar que volar no es un privilegio, sino una pasión y una salida profesional al alcance de todos. Está la aviación histórica de la Fundación PAC, la aviación general del Aeroclub, la militar y la comercial. También reivindicamos el papel pionero de Cataluña en la aviación, con fábricas como Elizalde o Hispano Aviación».
También habrá un Village y actividades divulgativas. ¿Qué importancia tienen?
«Mucha. Además de las exhibiciones, ofrecemos carreras de drones y puestos de empresas y entidades. De aquí surgen nuevas vocaciones: pilotos, ingenieros o mecánicos. El entretenimiento es la entrada, pero lo que queremos es sembrar futuro».
Hablamos de seguridad. ¿Cómo se ha planificado?
«Todo está regulado por el Real Decreto 1919/2009 y supervisado por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea. Hay distancias y alturas estrictas. Además, el dispositivo de tierra incluye policía, bomberos, ambulancias y vigilancia».
¿Cómo se coordinan tantos equipos internacionales, militares y civiles?
«Es un trabajo de todo el año y al final nos conocemos todos. Con los militares depende de la disponibilidad y este año coincide que muchos recursos se destinaron al aniversario de la Patrulla Águila. Pero para el futuro esperamos tener más presencia internacional».
¿Qué le hace especial ilusión de esta edición y cómo ve el futuro del festival en Salou?
«Lo que más me ilusiona es la sintonía con el municipio, una ciudad preparada y con un encaje ideal para acoger eventos de esta magnitud. Para el futuro, depende del Ayuntamiento; nosotros estaremos encantados de seguir viniendo».
¿Qué consejos daría a los asistentes y qué espera que se lleven del festival?
«Llegar con tiempo para encontrar aparcamiento, llevar protección solar y venir con ganas de disfrutar. Habrá puntos de comida y servicios. Y espero que el público salga boquiabierto, impresionado por la fuerza y la belleza de los aviones, y que el impacto despierte en muchos la curiosidad y la vocación de adentrarse en el mundo de la aviación».