Sociedad
Denuncian lanzamientos desde fuera de la prisión de Mas d'Enric de sustancias y objetos prohibidos
Las secciones sindicales del centro penitenciario del Catllar aseguran que desde hace más de 2 años los trabajadores están sufriendo un «grave problema de seguridad»

Entrada de la prisión de Mas d'Enric, en el Catllar.
Las secciones sindicales del centro penitenciario Mas d'Enric (UGT, CCOO, Intersindical-CSC e IAC-CATAC) han alertado del «grave problema de seguridad» que están sufriendo los funcionarios de prisiones en el centro. Los sindicatos han hecho llegar una carta al conseller de Justícia, Ramon Espalader, donde explican que desde hace más de 2 años, aparte de los incidentes recurrentes como agresiones, peleas, aprensiones de sustancias y dispositivos móviles, objetos punzantes artesanales a internos, se suman los lanzamientos desde el exterior de todo tipo de sustancias y objetos prohibidos.
Las secciones sindicales afirman que el centro del Catllar está al arriba en el ranking de aprensiones de drogas a causa de esta moda extendida entre la población reclusa.
Además narran un incidente que se produjo en el mes de junio donde un interno simuló una emergencia médica mientras sólo había dos efectivos de interior en el módulo, momento en que desde un terminal móvil avisaron a los lanzadores del momento para tirar desde la cerca del bosque justo al lado de la valla del perímetro exterior hasta 8 paquetes, 4 de los cuales cayeron al patio. A posteriori se realizaron cacheos masivos sin éxito, siendo necesario la intervención de efectivos de otros módulos. A raíz de este incidente se produjeron 12 aislamientos de internos.
Desde los sindicatos confiesan que «no podemos más, es una temeridad esperar hasta que se produzca un lanzamiento con alguna cosa más que hachís, cocaína y teléfonos ininteligentes, como pueden ser armas que se puedan utilizar contra profesionales o internos, o heroína de gran pureza que provoque situaciones de sobredosis en un número elevado de internos».
Y finalizan que después de varias visitas de los responsables de seguridad, todavía no se les han informado de las medidas que prevén adoptar, y que tendrían que haberse implantado ya.