Política
Oliver Klein vuelve a ser el alcalde de Cambrils y empieza a perfilar un gobierno con el PSC y el PP
El alcalde se marca como prioridad resolver los conflictos laborales del consistorio y «cambiar el rumbo»

Oliver Klein sosteniendo la vara de alcalde al lado de Enrique Arce, edil socialista que ha presidido el pleno.
Cambrils ya tiene nuevo alcalde. El líder del Nou Movimient Ciutadà, Oliver Klein, fue elegido ayer alcalde con los seis votos de su partido y el apoyo del PSC y del PP. El resto de grupos municipales se votaron a ellos mismos durante la sesión extraordinaria con este único punto. De esta manera, se cierra la crisis política del municipio que inició con la expulsión del portavoz de Junts, Enric Daza y que comportar la dimisión del alcalde socialista Alfredo Clúa.
En sus primeras palabras como alcalde, Klein confirmó que hay un «principio de acuerdo» para integrar a los dos concejales del PP dentro del gobierno municipal, formando así una mayoría junto con los socialistas. De hecho, hay un borrador de cartapacio ya perfilado y se espera que las nuevas concejalías se hagan públicas oficialmente durante los próximos días.
En cuanto a las líneas de acción, Klein ha manifestado que trabajará «desde el primer día» poniendo como prioridad «reconstruir la confianza» con los trabajadores municipales. Muchos de los funcionarios sindicados del consistorio acudieron al pleno de ayer con pancartas para denunciar sus problemáticas laborales. Eso sí, los trabajadores se marcharon después de la toma de posesión de Klein.
El alcalde pidió a la ciudadanía una «paciencia, pero de unas semanas» para hacer frente a las cuestiones más relevantes del municipio. Klein asegura tener un programa «muy pensado» que «empezaremos a ejecutar inmediatamente». El alcalde lamentó que en los últimos años «no se ha hilado delgado» y afirma que toca «sacar adelante el municipio». Para cerrar su discurso, Klein remachó que «no es momento de los de reproches, sino de girar el rumbo de Cambrils».
La ruptura del pacto
Los reproches sí que estuvieron presentes en los discursos de la oposición, especialmente entre los grupos que formaban parte del gobierno de Clúa. Camí Mendoza, portavoz de ERC, asegura que «con este pacto a quien más pierde son los ciudadanos» y acusa al PSC de haber «traicionado» el anterior pacto. Hay que destacar que Mendoza pactó con los socialistas el último año de alcaldía en el acuerdo firmado también con Juntos y los Comunes.
Enric Daza, líder de Junts, avisa de «tácticas que no llevan a la estabilidad», aunque afirma que su grupo está dispuesto a hacer una «oposición constructiva». El de Junts se mostró «comprometido con Cambrils» y posicionó su grupo como «un aislado por la transparencia».
El más directo fue Jordi Barberà, concejal de los Comuns, quienes acusa el PSC de pactar con «la extrema derecha» y lamenta no haber podido construir «una mayoría de izquierdas encabezada por Klein».
Nuevos socios, pero conocidos
David Chatelain, portavoz del PP y futuro nuevo concejal de Hacienda, declara que actuará «con juicio y mano izquierda» dentro de su nueva posición. El popular defiende que esta nueva alcaldía llevará «progreso y estabilidad a Cambrils» y considera que es necesario «un poco de calma después de tanto ruido».
Finalmente, Alfredo Clúa, quien pasa de alcalde a concejal de Fiestas, se defendió ante las acusaciones de sus anteriores socios alegando que estaban «anclados al pasado». El socialista remarca que su grupo sólo ha buscado «una estabilidad basada en el proceso y la inclusión».
Este nuevo gobierno tiene unos socios conocidos, ya que Klein ya arrancó la alcaldía a Camí Mendoza en el 2021 con el apoyo del PSC y el PP. En aquella ocasión, también contó con la ayuda de Ciudadanos y los concejales no adscritos.