TURISMO
El turismo en la demarcación de Tarragona crece de 1,3 millones a casi 3,2 millones en 25 años
El 43% de los visitantes en Tarragona es extranjero, el resto son visitantes locales y de todo el Estado

Imagen de archivo de diferentes turistas caminando y comiendo en el paseo de Miramar de Cambrils.
El salto de escala que ha experimentado el turismo es una de las grandes transformaciones que ha vivido Cataluña durante el primer cuarto del siglo XXI. El país ha duplicado a los 13,4 millones de visitantes que ya recibía al final de siglo y se sitúa ahora en la raya de los 27,6 millones de personas, según datos del INE. Barcelona abandera esta explosión, con 12,7 millones de visitantes en 2024, casi la mitad.
Más allá de la capital, el turismo ha crecido en las principales destinaciones turísticas, y en general en todas las demarcaciones de Cataluña. La ocupación hotelera se ha más que duplicado en el área de Barcelona (de 5,3 millones a 13,1 millones, según datos de la Encuesta de Ocupación Hotelera del INE), y ha crecido de forma similar, en términos relativos, en Tarragona, de 1,3 millones a casi 3,2 millones.
En Tarragona, en los municipios de la Costa Daurada el incremento de visitantes en hoteles ha sido todavía superior, hasta un 120% más. Las cifras que reflejan el auge del turismo son el paso de 1,3 millones a 2,9 millones de clientes de hoteles entre 1999 y el 2024.
En la demarcación de Girona el salto es de 2,5 a 4,2 millones (un 66% más), y en Lleida es muy menor en números absolutos y relativos: de menos de 700.000 turistas en hoteles, cerca de 960.000 (un 37% de crecimiento).
Con respecto a las principales zonas turísticas, la Costa Brava capitaliza el turismo gerundense. El año pasado alojó 4 millones de visitantes sólo en hoteles (de los 4,2 de toda la demarcación), un millón y medio más que hace 25 años.
Origen de los clientes hoteleros
Los datos de ocupación hotelera por demarcación descubren el peso de los visitantes extranjeros sobre el total en cada territorio. En este aspecto, en el área de Barcelona mandan a los turistas extranjeros con hasta un 74% de los clientes hoteleros, muchos más que hace 25 años, cuando eran el 60% de ocupación.
Lejos de estos porcentajes se sitúan Tarragona (con un 43% de turista extranjero, más o menos como el año 1999) y particularmente Lleida, ahora con un 20%, eso sí, con ocho puntos más que al final de siglo. Girona es la única demarcación donde el peso de los extranjeros ha caído, aunque ligeramente, del 63% hace un cuarto de siglo, a un 60%.