Sociedad
El pueblo de Tarragona en el que ha tocado el Gordo dos veces en 10 años
Los trabajadores de la empresa premiada acumulaban medio centenar de décimos del número 72.897 y vivieron una Navidad de ensueño

La empresa se llevó 240 millones de euros del Gordo
Pasaban sólo dos minutos de las doce del mediodía cuando la suerte estalló en una fábrica de Riudecols. El número 72.897 fue el ganador del gordo de Navidad 2020, premiando cada décimo con 400.000 euros. La noticia llegó a la administración La Pastoreta de Reus, que vendió hasta sesenta series del número, con el 80% destinado a los trabajadores de la fábrica y el 20% restante en taquilla.
Riudecols se convertía en protagonista del sorteo por segundo año consecutivo, ya que el año 2019, parte de la Grande también había tocado en la misma nave de Industries Teixidó. En total, 240 millones de euros habían caído a la empresa, especializada en la manufactura de piezas mecanizadas de alta precisión, un hecho que generó un alivio muy bienvenido tras un 2020 marcado por los ERTO y las dificultades de la pandemia.
La reacción en la fábrica fue inmediata: gritos, abrazos y lágrimas de emoción. Maria Verbenas, trabajadora premiada, explicaba entre carcajadas y lágrimas: Yo gritaba y todo el mundo me decía que no era por lo tanto... ¡pensaban que sólo havíen tocado 5.000 euros»! Ella y su familia acumulaban cuatro décimos ganadores y sólo unos pocos compañeros se quedaron sin premio.
José Lucena, presidente del comité de empresa, reconocía que la alegría era doble: «Ha sido un año muy difícil, y eso es un alivio para los 440 trabajadores. Ahora podemos pasar una Navidad más tranquila y mirar al futuro con esperanza». La noticia se difundió rápidamente, con familiares y medios de comunicación sumándose a la fiesta improvisada en la nave.
En declaraciones a TV3, Òscar Bausà, titular de La Pastoreta, explicaba que nunca había vendido nada “tan grande” como la Grande y que se considera un “vendedor de ilusión”: «Hoy la ilusión ha entrado en nuestra casa», afirmaba emocionado. Además de Riudecols y Reus, el número premiado se había vendido también en ciudades como Punta Umbría, Granada, Madrid, Bilbao u O Grove, y en varias poblaciones con décimos sueltos.
Se trata de un hecho inesperado que ha creado historias personales memorables y dejará un recuerdo colectivo durante muchos años cada Navidad.