Economía
El Ayuntamiento Montblanc sigue acumulando impagos a proveedores
La oposición reclama medidas ante el retraso en los abonos mientras el consistorio quiere cerrar el año en equilibrio

Imagen de la Muralla de Montblanc
Las deudas siguen persiguiendo el Ayuntamiento de Montblanc, que quiere cerrar en el 2025 con los presupuestos en equilibrio. Les facturas impagadas a proveedores por parte del consistorio hace tiempo que superan la media de tiempo de 60 días establecida por la Generalitat, según confirmó el gobierno municipal en respuesta a las reclamaciones de la oposición al pleno del pasado martes. El alcalde del municipio, Marc Vinya, aseguró que el Ayuntamiento sólo ha sobrepasado 8,6 días esta media en el segundo trimestre, aunque tienen conocimiento que «no todo el mundo está conforme» con los retrasos. La oposición, en cambio, mantiene que el ayuntamiento «nunca ha mencionado el término de morosidad» y que ha superado la media en 130 días, según la normativa catalana que hace referencia al pago de proveedores.
Los problemas de impago que arrastra el Ayuntamiento desde el año 2019, con la anterior legislatura al cargo, provocaron la demanda de un crédito en mayo de este 2025 de 1,6 millones de euros en el Institut Català de Finances (ICF) para secar las cuentas, que hasta ahora se han presentado en negativo.
Actualmente, el Ayuntamiento cuenta con 2,3 millones de euros para efectuar obras y trabajos en el municipio y pagar a los proveedores, según explicó la concejala de Hacienda y Economía, Raquel Huguet. De estos, 1,5 millones se destinarán a la restauración y mejora de la Iglesia de Sant Francesc, que iniciaron el pasado miércoles y que dejarán poco margen al consistorio para afrontar pagos de más de 200.000 euros, tal como confirmó el alcalde.
Solución para finales de año
El Ayuntamiento espera paliar la situación para finales de año, aunque los pagos de facturas podrían seguir retrasándose «para tener tranquilidad y poder afrontar otras obligaciones», según explicó Vinya. El municipio todavía acumula una deuda de un millón de euros con el Consejo Comarcal de la Conca de Barberà, pero ejecutará los pagos a proveedores antes de finalizar el año con los ingresos de subvenciones que han sumado este año y que, aseguran, se presentan «complejos de tramitar» por su llegada fuera de plazo.
La inversión anulada de 2 millones en el Polígono de Cimalsa este septiembre también ha complicado el objetivo de saneamiento del Ayuntamiento, que comptaba con esta gran operación. De acuerdo con el consistorio, los pagos no se han podido llevar a cabo con antelación a causa de estos inconvenientes, provocando el uso de parte del presupuesto de las obras en la Iglesia para cubrir los gastos, devolviendo el dinero una vez llegadas las subvenciones del ICF.