Área Metropolitana
La forma jurídica del ente metropolitano, en manos de secretarios e interventores
Esta semana se reunirán los técnicos y después el Grupo Impulsor. Vila-seca se mantiene al margen

Imagen de la reunión del Grupo Impulsor del Área Metropolitana del Campo de Tarragona.
La decisión sobre la forma jurídica del ente que dará paso al Área Metropolitana está en manos de los secretarios y los interventores de los ayuntamientos. Los técnicos se pronunciarán primero sobre cuál es la mejor opción para los consistorios. Un consorcio, una asociación o una mancomunidad son las opciones que hay sobre la mesa. Diari Més ha podido confirmar que se ha convocado esta semana una reunión entre los secretarios e interventores de los ayuntamientos que forman parte del Grupo Impulsor, con la excepción de Vila-seca, quien se mantiene al margen porque «todavía no se ha recuperado la confianza» en «términos clave como la movilidad».
La semana pasada, la reunión del Grupo Impulsor acabó sin acuerdo y con el distanciamiento de la Diputación de Tarragona. Su presidenta, Noemí Llauradó (ERC), dejó entrever las intenciones de desmarcarse de este ente, pero con la voluntad de colaborar desde fuera. Esta fórmula de colaboración, sin embargo, no gustaría a los ayuntamientos socialistas (Constantí, Tarragona, Reus, Salou y La Canonja), partidarios de formar una asociación con la Diputación dentro.
Esta semana se reunirán los técnicos municipales, que recomendarán a los políticos cuál sería la fórmula jurídica idónea. A pesar de todo, serán los cargos electos los que tendrán que tomar la decisión final en una reunión del Grupo Impulsor que se prevé antes del inicio del verano, posiblemente el día 23 de junio. Esta reunión, sin embargo, todavía no se ha convocado. La decisión final se adoptará por mayoría de los miembros.
Vila-seca, en el margen
El Ayuntamiento de Vila-seca no participó en la reunión de la semana pasada a causa de la «falta de confianza» generada por las declaraciones del alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, sobre la ubicación de la futura estación Intermodal. Estas declaraciones se produjeron a mediados del mes de abril y, desde entonces, se han dado varios encuentros entre Viñuales y el alcalde villa-secano, Pere Segura, para reconducir la situación. De hecho, todo parecía encauzado, pero Vila-seca todavía no ha vuelto a participar en las reuniones del Grupo Impulsor (ni los encuentros técnicos ni políticos), y no se prevé que vuelva.
«Necesitamos que devuelva la confianza en temas primordiales como la movilidad. Lo que se ha hablado a las reuniones nos llega por la prensa, nadie se ha comunicado oficialmente con nosotros», indican desde el consistorio villa-secano. Parece, pues, que Vila-seca necesita un gesto más por parte de los miembros del Grupo Impulsor para volver a entrar en la dinámica metropolitana.
Les próximas semanas se prevén clave para desencallar una situación que, según las fuentes consultadas, se está alargando «demasiado». El objetivo de los ayuntamientos es encontrar una fórmula jurídica sencilla que sería inicial y que, más adelante, podría transformarse en caso de que fuera necesario.