Política
Sin acuerdo sobre la forma jurídica del futuro ente metropolitano
La Diputación deja en manos de los ayuntamientos del Grupo Impulsor la definición del modelo de gobernanza

El Grupo Impulsor del Área Metropolitana del Camp de Tarragona se reunió en el Palacio de la Diputación.
El Grupo Impulsor del Área Metropolitana del Camp de Tarragona se reunió ayer para debatir cuál tiene que ser la forma jurídica del ente que tendrá que liderar este proyecto metropolitano. En el transcurso del encuentro, se pusieron sobre la mesa diferentes propuestas, pero no se cerró ningún acuerdo. Durante los próximos días, los ayuntamientos analizarán «qué opción encaja mejor en su idiosincrasia» y se volverán a reunir «pronto» para «tomar una decisión consensuada».
Así lo explicó la presidenta de la Diputación de Tarragona, Noemí Llauradó, quien aseguró que la voluntad del Grupo Impulsor —liderado por la misma administración provincial— es que se acabe de definir «este verano» el modelo de gobernanza, que podría tener forma de asociación, consorcio, mancomunidad o fundación.
Sea cuál sea, este instrumento tendrá como finalidad avanzar en la construcción progresiva del Área Metropolitana del Camp de Tarragona y actuará como plataforma de consenso, generación de estrategia e impulso de proyectos transformadores para el territorio.
Igualmente, servirá para «dialogar con el resto de instituciones», así como para poder acceder de forma conjunta a ayudas y subvenciones. «Queremos ser más prácticos y pragmáticos», señaló Llauradó, quien afirmó que se ha puesto «mucho énfasis en los valores que tiene que tener este espacio estratégico de gobernanza», como la «transparencia» y «la visión metropolitana, por encima de las visiones de cada uno de los miembros del Grupo Impulsor».
La Diputación ha dejado en manos de los ayuntamientos la decisión de cuál tiene que ser la forma jurídica de este ente. Desde la creación del Grupo Impulsor en diciembre del 2023, la administración supramunicipal está coordinando los instrumentos de gobernanza del Área Metropolitana. Con la creación de este nuevo modelo, podría dar un paso al lado y pasar a colaborar de forma externa; por ejemplo, a través de un convenio.
Más allá de debatir sobre el espacio estratégico, durante la reunión de ayer se acordó la creación de la Oficina para el desarrollo y la competitividad del Camp de Tarragona, aunque su naturaleza jurídica todavía se tiene que determinar. «Será el brazo ejecutor del ente metropolitano», explicó Llauradó. Esta nueva herramienta servirá para captar recursos e inversiones a nivel internacional, hecho que permitirá a los municipios poder trabajar de forma integral y unitaria para ofrecer muchos más atractivos turísticos y de ocio de forma conjunta.
Un gran ausente
En la reunión, hubo un gran ausente: el Ayuntamiento de Vila-seca. Todavía no se ha dado el clima de confianza para que su alcalde, Pere Segura, participe, después del choque que tuvo con el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, por la ubicación de la estación Intermodal. Sin embargo, la presidenta de la Diputación se muestra optimista sobre su vuelta al Grupo Impulsor.