La borrasca Olivier podría traer lluvias de sangre a Tarragona en los próximos días

La borrasca Olivier, aunque no tendrá un gran impacto en Cataluña, sí que provocará la llegada de precipitaciones e incluso que se puedan llegar a producir episodios de lluvia de sangre en Tarragona en los próximos días. De hecho, según eltiempo.es, se espera que, a partir del domingo, el polvo en suspensión se desplace hacia el este peninsular, hecho que afectaría a Cataluña y, más concretamente, a la demarcación de Tarragona.

Un dato que confirma la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), ya que, según sus previsiones, durante el domingo por la tarde, la probabilidad de lluvia -que iría acompañada de barro- es del 80%. Eso sí, no solo lloverá durante el domingo en la demarcación, ya que para el lunes la probabilidad es del 80%, para el martes es del 90% y para el miércoles es 65%. Eso sí, aunque todavía es pronto para confirmarlo, se prevé más estabilidad en el tiempo a partir del jueves.

¿Qué es la lluvia de sangre y por qué se llama así?

La expresión lluvia de sangre no hace referencia a ningún fenómeno extremo ni peligroso, aunque su nombre pueda resultar alarmante. Así pues, el término es una denominación popular que se utiliza para describir las lluvias que arrastran partículas de polvo en suspensión, principalmente procedentes del norte de África.

Cuando estas gotas de agua cargadas de arena caen sobre superficies claras, dejan un residuo terroso o rojizo que recuerda al color de la sangre, especialmente en vehículos, ventanas o suelos. Por eso, aunque el nombre científico es lluvia de barro, el apodo «lluvia de sangre» se ha extendido en el lenguaje cotidiano y es muy buscado en internet cada vez que se prevé un episodio de calima y lluvias combinadas.

Así pues, la lluvia de sangre es un fenómeno cada vez más habitual en España, sobre todo en primavera y otoño, cuando los sistemas atlánticos interactúan con irrupciones de aire africano. La situación de este fin de semana se suma a un combo meteorológico que incluye la borrasca Olivier y esta lluvia de sangre. Todo ello marca un arranque de Semana Santa con una meteorología intensa y cambiante.