Movilidad
El caos gobierna durante los primeros días de restablecimiento de Rodalies en Tarragona
Retrasos de dos horas, paradas y lavabos estropeados marcan las primeras 24 horas del servicio ferroviario

La estación de Tarragona, llena, este lunes por la noche por los retrasos acumulados.
Las primeras veinticuatro horas de restablecimiento del servicio de Rodalies por la costa en las comarcas tarraconenses han estado marcadas por los retrasos y las incidencias. De hecho, el primer tren que hizo parada en Tarragona llegó con cincuenta minutos de retraso a Barcelona y dos horas después se vio parado el servicio por falta de energía en la catenaria.
La situación se vio agravada durante la noche, cuando el último tren de esta línea acumuló hasta dos horas de retraso después de acumular varias paradas, especialmente concentradas en torno a Sant Vicenç de Calders y el túnel de Roda de Berà.
«Estamos en medio de la nada, estamos cansados», gritaba un pasajero de este convoy durante uno de los parones. Al otro lado, un maquinista que se ofreció a atender a los usuarios, pero que se veía incapaz de dar respuestas satisfactorias. El vehículo se quedó parado en un punto donde no se podía dejar bajar a los pasajeros y los lavabos no funcionaban, agravando la situación para los usuarios.
La situación también se tensionó durante la noche en la estación de Tarragona, donde decenas de personas ocupaban el andén mientras las pantallas anunciaban retrasos en prácticamente todos los viajes. Algunos, como el de las líneas R14 y R16, acumulaban una demora de prácticamente dos horas.
Los primeros trenes de la mañana siguiente no tuvieron mejor suerte, ya que una incidencia entre Torredembarra y Sant Vicenç de Calders provocó retrasos de unos veinte minutos en los primeros viajes del servicio en las líneas R13, R14, R15, R16 y R17.
Por otra parte, algunos usuarios de las Terres de l'Ebre tuvieron que utilizar un autobús para llegar hasta Vila-seca ante los retrasos. «He estado cuatro horas para llegar a Barcelona», afirmaba un usuario que había cogido el tren en l'Ampolla, «no entiendo que está pasando, se supone que ahora tenía que funcionar bien», se quejaba.
Horas después, durante el mediodía, una nueva incidencia en las instalaciones volvía a bloquear el servicio de los regionales sur entre Sant Vicenç de Calders y Cunit. Este incidente obligó a activar de nuevo el servicio alternativo por carretera, con autobuses desde Cunit hasta Torredembarra y Sant Vicenç de Calders. Este nuevo problema provocó retrasos de dos horas, según apuntan algunos usuarios.
Durante el restablecimiento del servicio, Sílvia Paneque, consejera de territorio pidió «comprensión» a los usuarios asumiendo que habrá retrasos en estos primeros días. Paneque mantiene que el servicio mejorará, pero subraya que «hará falta tiempo para paliar años sin inversión».