Un pastor de Viladrau se lleva el 33.º concurso internacional de perros pastores de Prades

El pastor Moisés Tarrés, originario de Viladrau (Osona), ganó ayer el 33.º concurso internacional de perros pastores de Prades, en la comarca del Baix Camp. Junto con el perro Mac, Tarrés se impuso a los 13 pastores venidos de Cataluña, Comunidad Valenciana, Mallorca y País Vasco que este año participaron en la competición, pausada durante dos años por las restricciones sanitarias. En estas pruebas, los pastores tuvieron que demostrar sus habilidades a la hora de dominar un rebaño de ovejas. Obediencia, tiempo y respeto hacia el ganado son los principales elementos que el jurado valoró en el veredicto. La alcaldesa, Lídia Bargas, señaló que el acontecimiento es un atractivo turístico a escala tanto nacional como internacional y que representa un impacto económico directo en la restauración del pueblo.

El concurso se dividió en dos pruebas. En la primera, de siete minutos de duración, la obediencia de los perros y la destreza a la hora de dominar el ganado fueron la clave|llave para clasificarse en una segunda fase. De los catorce pastores inscritos, sólo cinco consiguieron superar los retos propuestos. En la segunda ronda, los participantes tuvieron que dirigir el rebaño en un corral y, posteriormente, lo tuvieron que sacar en sólo cinco minutos. Sólo tres pastores lo alcanzaron en el tiempo indicado.

Una de las novedades de esta 33.ª edición de la competición, que este año ha reunido cerca de un millar de personas en el campo de fútbol municipal, fue la rotación del ganado. Con la voluntad de evitar estrés entre los animales, se optó por aumentar un grupo más de rebaño. De esta manera, fueron cuatro los rebaños que salieron al campo de fútbol municipal para disputar el concurso internacional de perros pastores. Ahora bien, que fueran más ovejas no rebajó la dificultad de las pruebas. «El concurso de Prades siempre se ha caracterizado porque las ovejas son bastante duras, les cuesta moverse. Por eso, hacen falta perros potentes, porque tienen que trabajar mucho», señaló Moisès Tarrés, ganador de esta edición, con 223 puntos. Este fue el segundo concurso de perros pastores de Prades para Tarrés, pero el primero para el border collie de cinco años, en Mac, con quien únicamente se comunica a través de un silbato. «Mac hizo un trabajo excelente, es un perro que trabaja día a día y hoy lo ha hecho muy bien», manifestó Tarrés. Hace cinco años que este pastor de Viladrau se dedica al pasto, con un rebaño de leche de un centenar de ovejas con las cuales hace quesos a través del Esquellot del Montseny. Con respecto al resto de la clasificación del concurso, detrás de Tarrés se situaron los pastores Hilari Novillo con la perra Beyoncé (Sant Pedor, Barcelona), con 220 puntos, e Ismael Boix con la perra Neska (Morella, Castellón), con 176,5 puntos.

Reconocimiento al pastoreig

Este concurso, iniciado el año 1988 y que se ha ido celebrando cada primer domingo de agosto, exceptuando los dos años de pandemia, quiere ser un reconocimiento al mundo del pastoreo y al trabajo que llevan a cabo los pastores en la prevención de incendios ya que ayudan a mantener los bosques con la limpieza del sotobosque. El presidente de la asociación de concursos de perros pastores de la Sierra de Prades, Joan Musté, insistió en la necesidad de contar con el apoyo institucional. «Estamos perdiendo el sector primario, nos quejamos de que los bosques están sucios, pero no hay ninguna ayuda ni ninguna manera que los pastores saquen adelante porque todo son inconvenientes. Se tiene que regular, pero hasta cierto punto», dijo.