Los consumos demuestran que Roda no tuvo una llegada masiva de personas de segunda residencia durante la Semana Santa

A partir del análisis de los datos del consumo de agua, el equipo de Gobierno ha constatado que durante los nueve días de Semana Santa no existió un repunte de visitantes de segunda residencia, y no hay diferencia en cuanto al consumo de las semanas anteriores de confinamiento. Incluso se confirma una disminución en los barrios costeros.

Se han comparado los datos de los 9 días de Semana Santa de 2019, que se alargó del 14 al 22 de abril, con las de 2020, desde el 5 hasta el 13 de abril. La tendencia es la misma en todos los barrios donde se concentra la mayor parte de la segunda residencia de Roda de Berà. Si sumamos el consumo de todos los barrios donde gestiona el agua

Sorea, el consumo durante los días de Semana Santa se redujo en un 72,41%, desde los 19.086 metros cúbicos en el 2019, hasta los 11.070 de 2020, una diferencia de 8.016

metros cúbicos.

En concreto, por ejemplo, en Costa Daurada durante aquellos días la media de consumo diario fue de 295 metros cúbicos, un 132,33% menos que en el 2019, que fue de 686

metros cúbicos diarios. Tenemos que tener en cuenta también que los establecimientos de restauración están cerrados pero que el consumo de agua en los hogares se ha podido incrementar para mantener las medidas de higiene contra la COVID-19.

En el núcleo urbano y en los barrios del norte del municipio, sin embargo, también se ha visto reducido el consumo de agua, según los datos que se han extraído del consumo de los pozos de Cal Llorenç, de la calle Roma, de la plaza Martorell y de Barà Mar.

Recogida de la basura

Con respecto al análisis de la recogida de la fracción rechazo, un dato que el Ayuntamiento ha utilizado en otras ocasiones para cuantificar la población flotante durante la época estival, por ejemplo, la tendencia es también la misma, no se constata una llegada considerable de visitantes.

Teniendo en cuenta los datos extraídos durante la Semana Santa, en el 2019 se recogieron 105.840 kilos de la fracción rechazo, de los cuales 96.920 kilos correspondían al conjunto

del municipio, y el resto, 8.920 en los campings. Este año, el efecto del estado de alarma ha hecho que este dato se haya reducido hasta los 61.380 kilos, una diferencia de 44.460 kilos, lo que supone una reducción del 42,01%.

Los datos de la recogida de la basura durante las primeras semanas de confinamiento son muy similares a las de los días de Semana Santa. Por ejemplo, durante

el martes 17 de marzo se recogieron 11.000 kilos de rechazo, y durante el 19 de abril, el viernes Santo, 10.000 kilos (10.180 kilos menos que durante el viernes Santo de 2019).

Finalmente, según los datos obtenidos de la fracción rechazo y comparados con el censo de población actual, el departamento de Servicios Técnicos ha hecho un cálculo y con el valor medio diario de producción de basura por persona, se ha considerado que durante la Semana Santa el incremento se situaría en una cincuentena de personas más, pasando de 7.068 habitantes (censados) a 7.118.

Según las conclusiones que se extraen del informe elaborado por el departamento de Servicios Técnicos con los datos de la recogida de la fracción rechazo, a partir del decreto de estado de alarma y el confinamiento de la población, no ha habido una variación considerable en la población flotante del municipio.

Con los datos en la mano, el alcalde Pere Virgili ha asegurado que como ya se intuía por los datos aportados por la Policía Local «la ciudadanía ha respetado las medidas de confinamiento y no se han desplazado a sus segundas residencias, manteniendo una actitud responsable y solidaria».