Querol inaugura la primera fase de la restauración de su castillo sin fecha de apertura al público

El municipio de Querol (Alt Camp) ha terminado la primera fase de las actuaciones de urgencia al Castillo de Querol, iniciadas al principio de año, y que se han inaugurado este domingo. Los trabajos han consistido en rehabilitar los muros de la fortificación que se encontraban en una situación «crítica». El castillo, fechado del siglo X, todavía no tiene fecha de apertura al público por motivos de seguridad. El ayuntamiento prepara un estudio arqueológico e histórico para hacer nuevas intervenciones en el recinto. Entre las prioridades destacan excavar su interior para desenterrar nuevas edificaciones y hacer accesible el espacio, dado que en la actualidad se accede a través de una propiedad privada.

El castillo de Querol fue destruido el año 1835 durante las guerras carlistas y, desde entonces, han pasado 184 años sin que se haya hecho ninguna actuación de recuperación. De hecho, el ayuntamiento ha estado negociando durante los últimos cinco años con los propietarios de la finca y no ha sido hasta este septiembre cuando adquirió la titularidad a través de un acuerdo por su cesión.

Así, al principio de este año se puso en marcha la primera fase de las actuaciones para rehabilitar las paredes de la fortificación. «Hemos hecho las obras más urgentes, teníamos unos cuantos muros que estaban a punto de caer y hemos salvado la parte más antigua», ha explicado el alcalde del municipio Jordi Pijoan. «A partir de aquí iremos descubriendo la historia del castillo que está enterrada y que según los estudiosos tiene un gran potencial», ha subrayado Pijoan.

Los primeros trabajos han consistido en consolidar el torreón más antiguo, muy desfalcado en la torre norte y construido con la técnica opus spicatum, y también se ha reforzado la bóveda de la antigua bodega, donde se han tapado unos antiguos impactos que podían provocar el hundimiento de una pared con almenas. Finalmente, se ha consolidado y reconstruido la pared que se hundió hace unos años. Según el arqueólogo municipal, Isidre Pastor, esta cerradura desmoronada fue el «detonante» para actuar «de urgencia». Para el arqueólogo, esta primera fase ha servido para garantizar la estabilidad de los elementos arquitectónicos y, a la vez, para obtener información del castillo y, así poder programar próximas intervenciones. Además, espera que no se devuelva a hunde ninguna estructura más.

La primera fase del proyecto ha tenido un presupuesto de unos 40.000 euros, de los cuales 30.000 se han destinado a la mano de obra y al material usado y los 10.000 restantes por el estudio. El consistorio solicitó la línea de ayudas del Departament de Cultura para sufragar el coste de la rehabilitación de Béns Culturals d'Interès Nacional.

Sin fecha de apertura por precaución

Según el alcalde, están trabajando con un nuevo proyecto para hacer accesible y seguro el recinto, aunque todavía no han fijado los plazos de las siguientes intervenciones. Ahora mismo, para acceder al castillo se tiene que atravesar una finca privada y desde el ayuntamiento se quiere garantizar que el acceso sea libre. Delante de eso, una vez se pueda abrir el recinto al público se organizarán visitas guiadas. «Nunca será un acceso libre si no que se concertarán unas horas y días determinados para garantizar la seguridad y evitar el vandalismo», ha expresado Pijoan.