Ganadería
Ningún positivo de gripe aviar en las granjas situadas dentro del radio de 3 kilómetros del foco del Urgell
Este fin de semana analizarán las explotaciones del radio de 3 a 10 kilómetros, donde hay restricciones

Una explotación avícola de las comarcas de Lleida, en una imagen de archivo.
Las explotaciones avícolas y de autoconsumo situadas dentro del radio de 3 kilómetros del foco de gripe aviar del Urgell han dado negativo en la enfermedad y se encuentran «en perfectas condiciones sanitarias», según ha informado este viernes el Departament d''Agricultura en el marco de una reunión con el sector. Según el Gobierno, eso confirma «la buena evolución» de la contención del foco que se hizo público el miércoles y que afecta a una explotación con 230.000 gallinas ponedoras. Después de visitar y analizar las explotaciones situadas dentro del radio de 3 kilómetros de la granja afectada, este fin de semana los servicios veterinarios del Departamento visitarán y analizarán las granjas del radio de 3 a 10 kilómetros.
En paralelo, el Gobierno informa de que ya se ha activado el sacrificio de los animales de la explotación afectada, de acuerdo con la normativa sanitaria vigente, como medida de acción para evitar cualquier riesgo de propagación.
El Gobierno mantiene activada desde el miércoles la alerta sanitaria después de detectar un caso positivo en una explotación del Urgell. Eso implica restricciones a un radio de 10 kilómetros, donde los animales que hay en estas granjas quedan inmovilizados.
Hay que destacar que no hay ninguna otra explotación avícola dentro del radio de 1 kilómetro de la granja afectada y que no se han producido movimientos de animales desde esta explotación. De esta manera, si no hay ningún contagio más en 30 días se podría levantar el foco, según indicó el miércoles el conseller Òscar Ordeig.
Reuniones con el sector y con los alcaldes de la zona afectada
Este viernes el Gobierno se ha reunido telemáticamente con representantes del sector avícola para informarlos de la situación del brote de influenza aviar detectado en el Urgell y de las actuaciones que se están llevando a cabo para contenerlo.
En un comunicado, el ejecutivo señala que desde el día 24 trabaja «activamente» para la contención del foco, aplicando todos los protocolos sanitarios establecidos y en estrecha coordinación con el sector. En este sentido, remarca la profesionalidad del sector avícola catalán, a quién ve «altamente preparado y consciente de la importancia de la bioseguridad, hecho clave para prevenir la propagación del virus».
Además, desde el inicio del foco el Gobierno se ha reunido con los alcaldes y alcaldesas de los municipios incluidos dentro del radio afectado con el fin de trasladarles toda la información disponible, resolver dudas y coordinar las actuaciones necesarias.
Medidas de bioseguridad y salud pública
El Departament d'Agricultura recuerda la importancia de mantener y reforzar las medidas de bioseguridad en todas las explotaciones avícolas, entre las cuales limitar el acceso de personas ajenas a las granjas, extremar las medidas de higiene y evitar el contacto de las aves con animales salvajes.
La consejería pide que se notifique inmediatamente cualquier sospecha de síntomas compatibles con la influenza aviar a los servicios veterinarios oficiales, especialmente en aquellos casos en que se ha sido en contacto directo con animales. Este hecho se circunscribiría únicamente en el ámbito laboral de la explotación positiva.
Además, recuerda que la influencia aviar es una enfermedad infecciosa, causada por virus gripales de tipo A, que principalmente afecta a las aves. «El riesgo de transmisión a personas es muy bajo y excepcional», insiste Agricultura.
Finalmente, el Gobierno hace un llamamiento a la colaboración ciudadana, especialmente en la notificación de la presencia de aves silvestres enfermas o muertas. En este sentido, insiste en que hay que notificar cualquier hallazgo al 112 o a los Cuerpo de Agents Rurals, y en ningún caso tocar, mover o transportar las aves.
Asaja pide un plan contra la fauna salvaje
Por su parte, el presidente de Asaja Catalunya, Pere Roqué, ha valorado positivamente que las granjas situadas en torno a la explotación afectada estén libres de gripe aviar y ha pedido una indemnización para el ganadero afectado. Además, Roqué ha reclamado al Gobierno un plan de actuación directo sobre la fauna salvaje y cinegética ante la sospecha de que el origen de la enfermedad sea un pájaro silvestre.