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La inflación incrementa un 15% la recaudación del Estado, pero la Generalitat no lo notará hasta el 2024

Expertos detallan que el sistema de financiación centraliza el aumento de ingresos en IVA y Sociedades

Ampolles d'oli en un supermercat.

La inflación incrementa un 15% la recaudación del Estado, pero la Generalitat no lo notará hasta el 2024ACN

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La escalada de la inflación que vive Europa desde hace meses tiene un efecto directamente relacionado con los impuestos. De hecho, el encarecimiento de los productos y el aumento de los beneficios empresariales ha supuesto una subida de la recaudación que el Estado hace del IVA (+16,2% de enero a noviembre en comparación con el 2021) y el Impuesto de Sociedades (+26,8%), entre otros. Según datos de Hacienda, hasta noviembre la recaudación total había crecido un 15,9%, sumando más de 239.000 millones. Sin embargo, a pesar de que parte de este recurso se envían a las autonomías, el sistema actual de financiación hace que el gobierno español centralice estos ingresos extra y los reparta meses después, de manera que administraciones como la Generalitat no podrán contar con estehasta el 2024.

Tal como se muestra en el informe mensual de recaudación del Ministerio de Haciendacorrespondiente al mes de noviembre, todos los grandes impuestos han crecido en comparación con el 2021. Mirando los números, se puede observar cómo los tributos más relacionados con el consumo son los que más aumentan. Es el caso del IVA o del impuesto especial en el alcohol, que incrementa su recaudación más en un 25%. También ha registrado un incremento notable el IRPF, el impuesto que más recursos recogen para las arcas públicas, que ha crecido un 16% y ha superado los 102.000 millones de euros.

A pesar del buen comportamiento de los ingresos que recoge el Estado vía tributos, las administraciones locales y autonómicas tardarán bastante tiempo en ver estos recursos en sus presupuestos. Así lo apuntan varios expertos consultados por la ACN, que reconocen que el sistema actual de financiación premia la tarea recaudatoria del Estado, que tendrá un mayor margen de gasto en un momento clave marcado por la crisis de precios y con varias citas electorales a la vista.

Los anticipos y la titularidad del IVA

Según explica Albert Carreras, economista y catedrático de Historia e Instituciones Económicas de la Universidad Pompeu Fabra (UPF), el incremento de la recaudación de los grandes beneficia «directamente» a la administración recaudatoria, en este caso el Ministerio de Hacienda. En cambio, las administraciones «cotitulares» de los impuestos no reciben de inicio esta subida que supone un incremento de ingresos «espectacular». Eso se debe, detalla, al sistema de «anticipos» por el cual el Estado dosifica los recursos transferidos a las diferentes administraciones locales.

«La Generalitat tiene transferido y es titular del 50% del IRPF y del IVA, pero quien receta es el Estado y le va haciendo adelantos de la liquidación que le hará al cabo de dos años. (...) Eso hace que los ingresos de las comunidades sean más estables, pero a cambio no pueden disfrutar de los incrementos», resume el también miembro del Colegio de Economistas. Según Carreras, los anticipos actuales, con fecha del 30 de septiembre de 2022, mostraban un aumento de las transferencias del Estado en Cataluña del 6,8%, casi la mitad del aumento de la recaudación real.

Tal como reconoce el economista, la fuerte inflación de este 2022 ha sido «insospechadamente beneficiosa» para el Estado, ya que le ha permitido aumentar los ingresos y el gasto. «En la proximidad de un horizonte electoral eso siempre le importa a una administración pública. También le ha permitido incluso reducir el impacto de la inflación selectivamente a través de las subvenciones que ha hecho a la electricidad, el gas y la gasolina. Y todo eso reduciendo el déficit», asevera. Con este escenario, Carreras descarta completamente un incremento de los tipos del IVA o el IRPF.

A pesar de este escenario, no todas las voces son tan optimistas. Gaietà Garcia, economista y profesor de la escuela de negocios EAE, reconoceque es difícil que este aumento de la recaudación se prolongue en el tiempo. «El incremento de la inflación bufa todo el precio del producto, y, por lo tanto, la parte que le corresponde de IVA, pero solo si se vende la misma cantidad de bienes», alerta. En su opinión, el encarecimiento general de la vida y la subida de los tipos de interés que encarece las hipotecas puede hacer que no se prolongue mucho tiempo más este aumento de los ingresos. Según él, esta es la «gran incógnita» del panorama actual.

Según Garcia, este momento de crecimiento muy marcado de los ingresos tributarios también se debe en gran medida a la «bolsa de ahorro» acumuladodurante la pandemia en las cuentas de las empresas y las familias. Eso ha hecho que muchos consumidores hayan seguido gastando generosamente a pesar de la subida general de precios de los últimos tiempos.

Recursos récord que llegarán en el 2024

Desde el Ministerio de Hacienda confirman que las transferencias a las comunidades autónomas se cierran a dos años vistas, cuando se hace la «liquidación» entre la previsión hecha por el Estado y las cifras reales. Sin embargo, destacan que como la previsión de ingresos de este año ya es de «récord» administraciones como la Generalitat ya están recibiendo los datos más grandesde financiación de su historia. Con todo, niegan que el incremento de la recaudación se deba principalmente a efectos de la inflación. Así, atribuyen la subida repentina de los ingresos a otros fenómenos más relacionados con el buen comportamiento de la economía, como el aumento del empleo o el afloramiento de economía sumergida.

Desde el Departamento de Economía de la Generalitat confirman que el eventual incremento de la recaudación del IVA que se registre este año no se pagará finalmente hasta el 2024. En este sentido, recuerdan que la «liquidación» de estos ingresos se hace a dos años vista, de manera que se comunicará este verano y se recibirá a mediados de 2024. Con todo, fuentes de la consejería que encabeza Natàlia Mas destacan que lo que se sabrá este verano es una «previsión» y que el importe definitivo no se sabe hasta el momento en que se recibe. Sin embargo, apuntan que los «decalajes» entre previsión y transferencia final se producen «cada año», independientemente de si hay inflación o no. Desde el Gobierno atribuyen esta falta de precisión a las carencias propias del sistema de financiación autonómica que desde Cataluña hace años que se pide actualizar.

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