Diari Més

Los disc-jockeys exigen una normativa «clara» para reanudar la actividad

El sector se siente discriminado y advierte de meses consecutivos de facturación negativa

Un DJ poniendo música en un bar musical.

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Los disc-jockeys exigen una normativa «clara» para poder reanudar la actividad después de trece meses. «Que nos digan cómo y nosotros lo haremos tal como nos digan», ha dicho el disc-jockey y vicepresidente de la Asociación Española de Disc-Jockeys y Productores (AEDYP), Albert Neve, en declaraciones a ACN. Neve ha considerado que no se les «ha dejado trabajar» y, en la misma línea, ha asegurado que el colectivo está discriminado «sin motivo ni justificación». «Los teatros, aunque con el 50% de aforo, tienen todos los actores encimadel escenario haciendo la obra», ha apuntado el disc-jockey Jordi Carreras. Por eso, reivindican su profesión. «Trabajamos con la música, que es cultura, y no nos tratan como tal», ha insistido Carreras.

«Está muy bien que la pandemia marque la agenda social y de ocio, pero ya hace un año que convivimos con la pandemia y sabemos de dónde puede venir el riesgo y de dónde no, cuáles son las medidas que nos ayudan a mantener los indicadores al mínimo. Pues que hagan una normativa de cómo se puede trabajar y en qué circunstancias», ha dicho Neve. Asimismo, ha afirmado que el sector está dispuesto a trabajar al aire libre y en horarios diurnos, con «todas las garantías sanitarias que hagan falta». «No es que queramos hacer más que el resto de sectores tocados por la pandemia, que prácticamente son todos, sino que se nos ha prohibido trabajar sin argumentos», ha dicho Neve.

Los dos disc-jockeys han asegurado que el sector está «muy tocado» y tienen facturación negativa, ya que tienen que invertir en publicidad, marketing, diseño y mantener los estudios. «La gente no es consciente del trabajo que hay detrás de un disc-jockey», ha recalcado Neve. En este sentido, han asegurado que todo también afecta a técnicos de sonido, productores o transportistas, entre otros. Además, la mayoría son autónomos y han avisado de que no les han «perdonado» las cuotas.

Poca actividad a escala internacional

Además, han asegurado que algunos de ellos también dependían de las contrataciones que tenían fuera del estado. Derivado de las restricciones por la pandemia y la necesidad de hacer cuarentena se «multiplican» los costes de la contratación, que en muchos casos tiene que asumir el empresario. Al respecto, Neve ha explicado que la última experiencia que ha tenido fue en octubre en la ciudad del Cairo.

Vacunación y test de antígenos

Los disc-jockeys han adelantado que muchos empresarios del sector del ocio, si los dejaran, permitirían utilizar sus locales como puntos de vacunación. Dado que lo ven «muy complicado», han asegurado que pedirán poder hacer pruebas de antígenos en la entrada de los recintos, independientemente del nivel de aforo que se les permita. El coste, según han dicho, lo asumiría el empresario.

Mirada puesta en el verano

Con respecto a las perspectivas de futuro, el sector tiene las esperanzas depositadas en la temporada de verano, cuando aseguran que «empezará a verse la luz». De hecho, vista la «temporalidad» de su trabajo, adelantan que, en caso de que no puedan reanudar la actividad durante estos meses, eso les afectaría «negativamente». «Personalmente si para Fin de Año no hay claridad, tendré que buscar alternativas», ha afirmado Neve.

Iniciativas para divulgar la profesión

Después de todo, aseguran que hay «intoxicación» hacia la figura del disc-jockey y por este motivo desde la irrupción de la pandemia el colectivo se ha agrupado bajo la Asociación Española de Disc-Jockeys y Productores (AEDYP). La entidad quiere «defender los derechos y dignificar la imagen» del sector. En la misma línea, el disc-jockey Jordi Carreras ha publicado su tercer libro, Deejay (Elliptic Media), para «divulgar» el oficio, desde las cuestiones más básicas hasta las más técnicas.

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