Diari Més

Educación

Las familias aportan cada año 148 MEUR a los centros educativos públicos

La FaPaC denuncia que escuelas e institutos derivan a las familias conceptos que tendría que asumir la administración

Mochilas y batas colgadas en un pasillo del instituto escuela Montsant, en Cornudella.

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Las familias destinan cada año 148 MEUR a gastos de funcionamiento de los centros, si se tienen en cuenta los 4,3 MEUR que las AFA aportan a la escuela o instituto, los 65,3 MEUR en cuotas de material, y los 78,4 MEUR para salidas escolares.

Es el principal dato que surge de un estudio que ha hecho la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Cataluña (FaPaC) a través del cual denuncia que el Departamento se ahorra estos importes porque se derivan a las familias a través de las peticiones hacen los mismos directores de centro en función de las necesidades. El informe de la FaPaC pone de manifiesto que las cuotas pueden variar entre territorios y sobre todo entre proyecto pedagógico, con un peso mayor en las escuelas innovadoras.

Las aportaciones que hacen las familias a las escuelas proceden de dos fuentes diferente de financiación, las AMPA o AFA y las cuotas que asumen por material, salidas o comedor escolar.

En el caso de las asociaciones de familias, por término medio se pagan cuotas de 31 euros anuales, que varían en función del territorio y del tipo de proyecto pedagógico. Con estas cuotas y otras subvenciones, que pueden ser de carácter público, de otras administraciones, o privado, de entintats como la Obra Social 'la Caja', las AMPA tienen fondo para financiar las actividades propias de la iniciativa (fiestas, actividades, etc.) pero hacen también aportaciones cada curso en los centros.

El estudio de la FaPaC cifra en 4,2 MEUR la cantidad que aportan las AMPA en las escuelas e institutos públicos, que por término medio supone 4.000 euros por asociación y escuela. 2 MEUR se transfieren a través de una aportación monetaria y los 2,2 MEUR restante en especias, es decir, en material informático, mobiliario u otros conceptos que pueda necesitar la escuela. Eso supone que sólo el 69% del dinero que recauda el AMPA se dedica a la actividad propia, y el resto se mujer en el centro.

La directora de la FaPaC, Lidón Gasull, ha alertado que las AMPA de zonas con rentas altas tienen más capacidad recaudatoria a través de las subvenciones, y que este dinero acaba financiando «de forma encubierta» el sistema educativo público, que cada vez, ha añadido, es más «dependiente» de esta forma de financiación.

Uno de los conceptos que se financia de esta manera es la contratación de profesionales en horario lectivo, una fórmula utilizada por 95 centros el curso 2017-2018. Mayoritariamente se contrataron profesionales de idiomas, en un 23,3% de los casos, o Técnicos de Educación Infantil (TEI), en un 20,7%.

Para Gasull, es una «irregularidad» la contratación de profesionales en horario lectivo ya que son trabajadores de la educación pública y considera que el último responsable tiene que ser el departamento de Educación. Critica que, de esta manera, la responsabilidad que tienen hacia el alumnado «desaparece» aparte de crear un problema en normativa laboral.

La mayor parte de las contrataciones se hacen en entornos de renta media, pese a que, desde la FaPaC se seguirá estudiando porque en los centros educativos situados en zonas socioeconómicamente desfavorecidas, contratan el triple de profesionales que los AMPA o AFA de zonas de renta alta.

Material y salidas

La gran aportación de las familias en las escuelas se hace a través de las cuotas de material escolar y las salidas. Con una media de 88 euros, y una variabilidad del 300% entre las Terres de l'Ebre (31,2 euros) o el Vallès Occidental (124 euros), el 96% de las escuelas e institutos cobran esta cuota. Para Gasull, es una muestra que la cuota está «institucionalizada» a pesar de no ajustarse a ley.

Con respecto a las cuotas de salidas escolares, la FaPaC ha calculado que la media es de 105,6 euros, con variaciones de hasta un 126% entre las Tierras del Ebro, de 55,9 euros, y el Vallès Occidental, del 126,6 euros).

La cifra incluye en el 78% de los casos, el coste de la salida por alumno, y en un 36% y un 25% de los casos, también el coste de los maestros acompañados y de los monitores, respectivamente. Por Gasull, este coste, al ser salidas en horario lectivo tendría que recaer en el Departamento de Educación, que tiene que asumir el profesorado y los monitores que se contratan.

Irregularidades en el precio de los comedores

El estudio de la FaPaC también ha analizado el coste del comedor escolar y de las actividades del mediodía. A pesar de no ser lectivo, el Departamento marca un precio máximo de 6,20 euros por comida, pero en cambio, más de un 12% desde centros cobran hasta 8,20.

El 55% de estos centros son comedores escolares gestionados por la administración. Por eso, la FaPaC ha criticado que sea la misma administración quien incumple «la propia normativa».

Desde la Federación también han criticado que el tiempo del mediodía se ofrezcan actividades no incluidas en el precio del comedor pero que en cambio, formen en aprendizajes que se tendrían que garantizar en horario lectivo, como puede ser la informática o los idiomas. La FaPaC también se ha dado cuenta de que los centros para proyectos tienden a ofrecer más actividades de este tipo.

La responsabilidad de las familias

En total, en concepto de materiales, las familias aportan 65,3 MEUR cada curso, y en concepto de salidas 78,4 MEUR, cosa que supone 143 MEUR que, sumados a los 4,2 MEUR que dan las AMPA, implica que los padres y madres pagan un total de 148 MEUR cada curso en gastos de funcionamiento que, por ley, tendría que asumir el Departamento de Educación.

Al no hacerlo, ha alertado la FaPaC, incumple su propia normativa y vulnera derechos como el de igualdad y el de la no discriminación además de los principios de gratuidad y universalidad, que marca tanto la LOMCE como la LEC. La FaPaC ha recordado que el último presupuesto dedicaba 89 MEUR a los gastos de funcionamiento.

Gasull ha querido hacer recaer toda la responsabilidad hacia los responsables del Departamento y no las familias, ya que considera que las familias «sólo hacen aquello que los centros educativos les piden» y lamenta que los centros educativos ya no se dirijan al Departamento para reclamar la inversión necesaria, como si que pasaba a la primera época de los recortes, sino que derive este gasto a las familias.

La directora de la FaPaC ha recalcado que las cuotas de las AMPA sólo pueden servir para el propio funcionamiento que supone una tarea de custodia de la escuela, las actividades en horario no lectivo, las familias u otras iniciativas de formación o charlas, es decir, actividad «asociacionista», pero en ningún caso, ha reafirmado, se tiene que vincular al pago de gastos que tendría que cubrir el Departamento. Por eso, Gasull no se ha mostrado a favor de hacer un llamamiento a las familias para las cuales no paguen estas cuotas, y crear así uno «estado de alarma» pero ha defendido que se tienen que tomar medidas para que eso no pase.

El estudio se ha hecho en base a los datos de 1.200 asociaciones de familias, de las 1935 que tiene federadas la FaPaC y de las más de 2.300 de toda Cataluña.

Educación lo estudiará con «mucho interés»

Desde el Departamento de Educación se ha asegurado de que estudiarán el informe con «mucho interés» y se han puesto a la disposición de la FaPaC para seguir trabajando conjuntamente en «las mejoras y aportaciones que hagan falta».

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