Judicial
Declaran improcedente el despido de una trabajadora que orinó en utensilios de cocina de un horno de Sants
La empresa colocó una cámara en el obrador, que servía de vestuario, y no avisó
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha avalado la improcedencia del despido de una trabajadora de un horno de la estación de Sants de Barcelona que orinó en algunos utensilios de cocina. La mujer fue grabada por una cámara de seguridad oculta, pero el tribunal considera que la instalación de las cámaras tenía que ser comunicada a los trabajadores. Además, la cámara estaba instalada en el obrador del horno, que era el lugar en el que se tenían que cambiar de ropa los trabajadores.
Por todo eso, considera que la prueba para despedirla es ilícita y por lo tanto no se puede usar. La mujer fue grabada en agosto del 2018 orinando tres veces la misma mañana en utensilios de cocina que después simplemente lavaba con agua y volvía a colocar para utilizar. Poco después cogió una baja por accidente laboral, y después por enfermedad hasta noviembre. En octubre, sin embargo, fue despedida, cosa que la mujer aprovechó para denunciar el despido como improcedente.
Un juzgado de lo social ya dio la razón a la mujer, al considerar que la empresa no podía usar aquella cámara para demostrar los hechos y no despedirla. Por eso, obligaba a la empresa a readmitirla, pagándole todos los sueldos retrasados o a indemnizarla con 25.336 euros. Ahora el TSJC ha confirmado aquella sentencia. La empresa había colocado las cámaras porque había detectado que algún trabajador robaba dinero de la caja.