Diari Més

El exceso de refrescos provoca la calvicie, según un estudio

La alopecia tiene un gran componente genético, pero también influye el estilo de vida

Imagen de archivo de un refresco.

Un hombre muere después de beber 1,5 litros de refresco en 10 minutos en un día calurosoPixabay

Publicado por

Creado:

Actualizado:

La alopecia androgénica es el patrón de caída de pelo más común en los hombres, afectando a entre un 30 y un 50% de los varones antes de los 50 años de edad. Se sabe que tiene un importante genético, por lo que a menudo se asume que es poco lo que se puede hacer para evitarla o retrasarla; no obstante, en décadas recientes estamos empezando a descubrir una serie de factores del estilo de vida que podrían influir de manera muy importante en el proceso.

Así, según propone una investigación llevada a cabo por científicos de la Universidad Tsinghua de Pekín (China), el consumo elevado de refrescos edulcorados se relaciona con un riesgo aumentado de padecer alopecia androgénica.

Como señalan estos autores en el artículo publicado al respecto en la revista especializada Nutrients, para llegar a esta conclusión reclutaron una cohorte de 1028 estudiantes universitarios con una edad media de 27.8 años de 31 provincias chinas, y les hicieron rellenar cuestionarios con información socio-demográfica básica, el estado de su pelo, su dieta, su estado psicológico y su estilo de vida. Entre estas preguntas se encontraban algunas que se referían al consumo de zumos endulzados, refrescos, bebidas energéticas, leche endulzada, té endulzado y café endulzado.

De esta manera, hallaron que los participantes con alopecia androgénica tenían más posibilidades de tener mayor edad, ser fumadores actuales o exfumadores, tener un menor nivel educativo, mantener menos actividad física de modo habitual, tener una menor duración del sueño, haber experimentado ansiedad severa o síndrome de estrés post-traumático, tener una historia familiar de alopecia androgénica, tener condiciones relacionadas con la alopecia androgénica y haber sometido su pelo a tratamientos como tintes, permanentes o decolorantes.

A nivel dietético, subrayan que aquellos con alopecia androgénica consumían más comida frita, más azúcar o miel, más dulces y helados y menos vegetales que quienes no padecían la condición.

Este patrón era especialmente notable en el caso de las bebidas endulzadas: el grupo que padecía la alopecia consumía de media 4,3 litros semanales, frente a los 2,5 litros semanales que consumían quienes no padecían la condición.

Los autores del estudio han explicado en el portal de noticias médicas MedicalNewsToday algunos de los posibles mecanismos que podrían estar involucrados en esta relación, teniendo en cuenta que por la naturaleza del estudio no se puede inferir causalidad. Específicamente, han señalado que varios estudios han mostrado que el aumento de la glucosa en sangre relacionada con este patrón de consumo se asocia a una reducción de los niveles de glucosa en las partes externas del cabello, lo que podría conducir a la alopecia androgénica.

Por otro lado, de la misma manera que la alopecia se relaciona con una mayor incidencia de problemas de salud mental, lo mismo ocurre con el consumo elevado de refrescos azucarados, lo que ilustra lo complejo de la relación.

Similarmente, la Asociación de Bebidas Refrescantes apunta que «el grupo analizado estaba conformado por personas con mayores factores de riesgo para sufrir esta condición (el 60% de la muestra del estudio estaba conformada por personas con baja actividad física, mayores, fumadores, enfermedades asociadas con alopecia o causas genéticas). Además, también se señala que no hay evidencia suficiente para establecer una relación causal».

tracking