Diari Més

Felipe VI apela a los «principios morales y éticos» por encima de «consideraciones familiares» sin mencionar a su padre

El rey dedica gran parte del discurso al año marcado por la covid-19: «Ni el virus ni la crisis económica nos abrumarán»

El rey de España, Felipe VI, durante el discurso de la nochebuena el 24 de diciembre del 2020. Plan|Plano tres cuartos.

El rey de España, Felipe VI, durante el discurso de la nochebuena el 24 de diciembre del 2020. Plan|Plano tres cuartos.Cedida

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El rey Felipe VI ha hecho un llamamiento a «preservar los valores éticos que están en la raíz de la sociedad» y ha advertido que «obligan a todos sin excepciones». En su discurso de Navidad, ha hecho referencia a los «principios morales y éticos que los ciudadanos reclaman» y ha señalado que «están por encima de cualquier consideración de la naturaleza que sea, incluso de las personales y familiares.» «Así lo he entendido siempre, en coherencia con mis convicciones, con la forma de entender mis responsabilidades como jefe de estado y con el espíritu renovador que inspira mi reinado desde el primer día», ha añadido.

Esta ha sido la única referencia, implícita, a los casos que afectan su padre y rey emérito, Juan Carlos I, que huyó en los Emiratos Árabes Unidos y que recientemente regularizó su situación con Hacienda. El resto del discurso de Felipe VI se ha centrado en hablar de la crisis sanitaria, social y económica que ha provocado la pandemia de covid-19. «La respuesta a una crisis tan seria como la que estamos viviendo no puede venir de la mano de más desánimo o desconfianza», ha alertado.

«No somos un pueblo que se rinda o que se resigne en los malos momentos», ha aseverado, por lo cual ha pronosticado que «España tirará adelante» con «esfuerzo, unión y solidaridad». «Ni el virus ni la crisis económica nos abrumarán», ha proclamado.

El monarca ha tenido un recuerdo «con emoción y todo el respeto» para los muertos que el coronavirus ha dejado y ha reconocido que el 2020 «ha sido un año muy duro y difícil». «El virus ha irrumpido a nuestras vidas trayendo sufrimiento, tristeza o temor; ha alterado nuestra manera de vivir y trabajar, y ha afectado gravemente a nuestra economía», ha recordado. Ante este escenario, ha emplazado a la ciudadanía a «afrontar el futuro con determinación y seguridad». «Con confianza en nuestro país y en nuestro modelo de convivencia democrática», ha añadido.

También ha hecho un llamamiento a la «imprescindible» responsabilidad individual, «instrumento efectivo de la lucha contra el virus», y ha confiado a la ciencia y la investigación «la superación de esta enfermedad». «Los nuevos tratamientos contra el virus y el desarrollo de las vacunas que están en marcha nos ofrecen ya una gran esperanza, pero mientras tanto tenemos mucho para hacer», ha asegurado.

Felipe VI ha ofrecido su agradecimiento a los sanitarios «por su enorme esfuerzo, su extraordinaria profesionalidad y su gran humanidad con los enfermos». Ha recordar cómo se enfrentaron en los primeros meses de pandemia «en situaciones extremas y también de desbordamiento». «Les pedimos que mantengan todo el ánimo y toda la fortaleza y que sigan cuidando de nuestra salud», ha dicho.

Con respecto al «gran problema y reto» de la crisis económica, ha apuntado que las personas y familias tienen que ser «preocupación fundamental», especialmente en el caso de los jóvenes. «Su nivel de desempleo es altísimo y no pueden ser los perdedores de esta situación», ha reclamado. También ha pedido «fortalecer el tejido empresarial y productivo, industrial y de servicios» para recuperar la economía española y crear «un horizonte claro de impulso, estabilidad y confianza económica que anime la inversión y la creación de puestos de trabajo».

Todos estos retos, ha valorado, son «enormes pero no insalvables». «Superarlos constituye un gran objetivo nacional que en todos nos tiene que unir», por lo cual ha pedido «un gran esfuerzo colectivo» que acompañe un Estado que ve «sólido», ya que «durante todo este tiempo tanto los servicios públicos y básicos como las empresas en sectores esenciales han funcionado bien». «En un tiempo en que la pandemia y sus consecuencias económicas y sociales provocan tanta incertidumbre, nuestra Constitución nos garantiza nuestra manera de entender la vida», ha reflexionado.

Ni Catalunya ni el ejército

No sólo no ha habido ninguna referencia explícita a la situación de Juan Carlos I en el discurso de NAvidad de Felip VI, sino que tampoco ha hablado en ningún momento de la situación política catalana ni de los pronunciamientos de militares en contra del actual gobierno español y llamando a «fusilar» millones de españoles. Sí que ha alabado la «eficacia y entrega» de las fuerzas armadas y de los cuerpos policiales y de emergencias con respecto a la pandemia, pero no ha mencionado el hecho de que haya militares en activo haciendo este tipo de valoraciones públicas o en chats privados ni tampoco que mandos retirados le pidieran por carta que interviniera para parar los pies al ejecutivo del PSOE y Unidas Podemos.

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